Si algo define a Daniel Jacobs es su perseverancia y su capacidad de pelea. No sólo dentro, sino también fuera del ring. Venció un tipo de cáncer de hueso y regresó al máximo nivel de un boxeador de élite y se convirtió en campeón mediano de la Asociación Mundial de Boxeo al vencer a Jarrod Fletcher por nocáut técnico en el quinto round, en una pelea que sucedió el 9 de agosto de 2014.
Pues su primer compromiso como campeón fue ante Caleb Truax.
Desde el inicio, Jacobs fue incisivo y sus movimientos fueron precisos, con un ir y venir de jabs entre ambos contrincantes.
La estrategia de Jacobs fue plantarse alrededor de Truaxs para golpear desde afuera para darle movilidad a su ataque. Además, tuvo muy buena precisión.
Por su parte, Truax hizo uso del jab a velocidad y grandes derechazos para mandar a Jacobs a las cuerdas y dominarlo.
Pero cada que Truaz metía presión, Jacobs le respondía con golpeo a velocidad para sacarse de encima el ataque de Truax. Conforme pasó la pelea, Danny Jacobs apretó el paso y le soltó ráfagas que hicieron que el cuello de Truax latigueara.
Más aún, para evitar ser blanco fácil o que Truax le agarrara la medida, cambió de guardia de manera constante para que Caleb no pudiera acomodarse a gusto.
El dominio de Jacobs fue evidente de principio a fin, pero eso no significó que Danny bajara la intensidad, al grado de que consiguió noquear a su rival en el 12vo round, a base de volados lo mandó contra las cuerdas y el réferi determinó el final de la pelea.