Israel Adesanya quiere hacerse con Dricus Du Plessis. El campeón de peso mediano y su retador mejor clasificado se encontraron cara a cara por primera vez dentro del octágono en UFC 290 el mes pasado.
Las estrellas se alinearon cuando Adesanya había estado esperando y «manifestando» una sorpresiva victoria de Du Plessis sobre el ex campeón Robert Whittaker en la noche y eso es exactamente lo que obtuvo.
Du Plessis terminó con «The Reaper» con strikes en la segunda ronda de su competencia, demostrando que era una amenaza tan legítima como le dijo al mundo. La victoria preparó la muy esperada pelea por el título de las 185 libras como cabeza de cartel esperada de UFC 293 en Sydney, Australia, el próximo mes. Sin embargo, Adesanya ha afirmado recientemente que una lesión en el pie de Du Plessis evitará que la pelea se lleve a cabo cuando se espera.
“Ahora no quiere pelear. ncluso después de [UFC 290], dice: ‘Oh, hermano, todo lo que tenías que hacer era ponerte unos guantes, podríamos haberlo conseguido allí mismo’. Mierda de culo. No lo habrías hecho. Porque adivina qué? Él no lo quería. … La gente decía, ‘Oh, es tan elegante al irse. Él es tan [elegante]’. Estoy como, ‘Hermano, ni siquiera se alejó’. Me sintió. Él no quería sentirme.
Ambos hombres tienen sus perspectivas sobre el encuentro con Du Plessis sintiéndose de manera similar a Adesanya pero a su favor, por supuesto. El sudafricano aún no ha comentado sobre las afirmaciones de Adesanya, pero su compañero de peso mediano Sean Strickland intervino desde entonces, y señaló que la promoción está trabajando en una pelea entre él y Adesanya para UFC 293.
Adesanya está muy motivado para el enfrentamiento de Du Plessis cuando sea que llegue. En última instancia, «The Last Stylebender» solo está tratando este desarrollo actual como un caso de ladrido y nada de mordisco de su rival en ciernes.
“No es un hombre asustado, es un tipo duro. Es muy astuto y tiene un buen equipo detrás de él. equipo inteligente. No creo que sea un hombre asustado, pero te diré que me tiene miedo. Sabes cuando miras a alguien a los ojos, lo sabes de inmediato. No me llamó a la jaula, yo mismo entré en la jaula. Ni siquiera lo vi llamarme. Entré en la jaula porque hice que esto sucediera. Este hijo de puta: espero, realmente esperaba que él diera un paso al frente. Pero él es un ab ***, y te lo diré ahora mismo. Sigue entrenando. Sigue entrenando. Tengo algo para tu trasero, así que sigue entrenando”.