Tras 9 años de «fuga» de Hulk Hogan a WCW para, como él mismo dice, intentar sacar del negocio a WWE, regresó en WrestleMania X8 para una de las luchas más memorables que se recuerdan en la historia de WWE en general y de WrestleMania en particular. El SkyDome de Toronto fue testigo del pase de la antorcha entre Hulk Hogan y The Rock y el Hulkster lo recuerda así en el podcast de WWE After the Bell.
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► ¿Quién fue su maestro?
«André el Gigante me enseñó prácticamente todo hasta el punto de considerarme casi su hijo. En el pasado, antes de WrestleMania, tuvimos varias luchas en estadio universitarios y él tenía que dejar caer su peso sobre mi para aplastarme. Eso era la más lógico, pero yo le decía: ‘Jefe, ¿Qué quieres hacer?’ a lo que respondía: ‘No te preocupes’. Él hizo que me despreocupara de recordar todos los movimientos ya que simplemente teníamos que escuchar a los fans y dejarnos llevar por las emociones, la energía. Jamás en toda su carrera quiso preparar ninguna lucha.
«Cuando yo me fui a WCW durante 9 años a intentar sacar del negocio a WWE me ofrecieron volver y desde el principio me ofrecieron la lucha con The Rock, aunque ya me advirtieron que sería diferente a cuando yo estaba en la compañía, que habían cambiado muchas cosas. Acepté y me trajeron un ring a Miami porque hacía mucho que no me veían luchar. Vinieron Pat Patterson, Triple H, The Rock y su padre. Estuvimos hablando de la lucha y quisieron que la realizáramos allí delante de ellos. De ninguna manera iba a aceptar aquello porque no había gente y duele más cuando te caes.
«Estaba preocupado. Hablé con el padre de The Rock y le dije: ‘¿Qué va a pasar si salimos y a la gente no le gusta el combate?’ y el me dijo: ‘No te preocupes, tú mira a The Rock’. Cuando salimos eso fue lo que hicimos, él me miró antes de empezar y el estadio entero me abucheó; hicimos lo siguiente y la gente se volvió loca así que decidimos aflojar y bajar el ritmo de la lucha. Nos costó 4 ó 5 minutos llegar a donde teníamos que llegar pero si llegamos a hacer lo que teníamos pensado habría sido una pesadilla. Tienes que escuchar a la fanaticada y luchar con los oídos y con la atención puesta en lo que quieren los fans. Tienes que luchar con el corazón y eso es lo que me enseñó André«.
► Jamás sintió una fanaticada como la de WrestleMania X8 en Toronto
«Nunca sentí una fanaticada como aquella de Toronto. La de WrestleMania VI contra Warrior estuvo cerca pero aquella noche en WrestleMania X8 la gente estaba muy dividida. Muchos fans de The Rock y de Hulk Hogan. Era la tormenta perfecta, el tornado, el tsunami… todo viniendo a la vez. La energía era una locura. No sé qué habría pasado si hubiéramos podido tocar a toda esa gente. El ruido era una tremenda ola. Nunca he experimentado algo así, salvo la noche siguiente en Montreal. He visto las imágenes y sé que es un montaje pero no sé si fueron 8 minutos o 10 minutos pero fue también muy intenso. Hay un par de ocasiones más desde que regresé a la compañía».
