Una de las reacciones más rudas respecto a la decisión de suspender a Nick Díaz por 5 años por dar positivo en marihuana fue la de Henry Cejudo.
Se podría decir que la comunidad de peleadores de artes marciales mixtas de UFC están en contra del castigo contra Díaz porque lo consideran severo. No están en contra del castigo, sino de las formas a través de las que se llegaron a ese punto.
Ronda Rousey hizo público su desacuerdo e incluso comentó que la marihuana no debería estar dentro de las sustancias prohibidas porque no es una sustancia que mejore el rendimiento (incluso, en algunos estados de EU, el consumo recreativo y medicinal de la marihuana es legal).
Pero Cejudo fue más allá.
A través de su mánager, el ex campeón olímpico de lucha y actual contendiente por el título de peso mosca, decidió que no asistiría a combatir a evento alguno que UFC organice dentro del estado de Nevada (que trabaja bajo las reglas de la Comisión Atlética de Nevada, la que sancionó a Díaz) porque no confía en los exámenes anti dopaje que se practican en Nevada.
A continuación, la declaración completa de lo expresado por Cejudo y su mánager.
Estoy absolutamente desconcertado de cómo la Comisión Atlética de Nevada (CAE) manejó el asunto Nick Díaz. La cuestión aquí no es la magnitud de las sanciones impuestas a Nick Díaz, es el proceso en la determinación de la culpabilidad o inocencia de Nick Diaz. Discrepancias significativas entre las muestras. La CAE tiene la obligación absoluta de resolver esas discrepancias antes de la audiencia disciplinaria. Lo que la CAE hizo fue ignorar el debido proceso e ir directamente a la sentencia. Olviden los hechos y la existencia de pruebas, hablemos del castigo. La CAE ignoró los resultados negativos de los Laboratorios de Investigación y Pruebas en Medicina del Deporte, un centro de pruebas aprobado por la Asociación Mundial ANti dopaje especializada en la detección de drogas que mejoran el rendimiento (PED), y optaron por considerar un estudio realizado por un «cuestionable» laboratorio no especializado en PED. Además, la declaración del presidente que encabezó la audiencia de Díaz: «Creo que si hacemos una prueba hoy, saldría positiva » es algo anti ético. Creo que es un abuso de poder bajo el color de la autoridad, y una afrenta directa al concepto y la práctica del debido proceso. La justificación de la CAE, donde asegura que por falta de presupuesto para utilizar una instalación de pruebas aprobada es como decir que la justicia y un proceso bien realizado sólo se aplica si es barata y es asequible. La decisión de la CAE no parece estar basada en hechos o pruebas.
Espero sinceramente que UFC entra en el dialogue con la CAE sobre ese tema. Si no públicamente, de forma privada. Es muy lamentable, pero siento que es prudente dejarle saber a UFC que Henry Cejudo no realizará peleas en Nevada. Simplemente no tengo confianza en que la CAE pueda gestionar un proceso de pruebas justas y creíbles, o vaya a actuar de una manera justa e imparcial. A se le han hecho más de cien pruebas bajo las especificaciones de la USADA/USOC (de estilo olímpico pues) y nunca tuvo un resultado positivo. Eso es porque nunca ha utilizado una sustancia prohibida y también porque, en cada caso, la prueba se llevó a cabo por personal competente e imparcial en virtud de un programa creíble utilizando acreditados por los laboratorios de la AMA . Yo personalmente aplaudo a UFC por la imposición de su política anti dopaje , ya que viene con el legado y la credibilidad de la USADA, así como los protocolos y procesos aplicados para asegurar una prueba justa y creíble. Lo opuesto sucede con la comisión de Nevada. Hasta que el proceso de prueba la CAE puede ser revisada de forma independiente y sus conclusiones se hagan públicas, al igual que las acciones correctivas tomadas, personalmente creo que no es un lugar seguro o creíble para realizar negocios. Eso incluye una revisión de las recientes acciones y competencias de los miembros de la Comisión. Otros pueden querer «tirar los dados» en Nevada, pero por mi parte, no creo que la CAE sea capaz de realizar el cumplimiento adecuado de reglamentos existentes, la realización de negocios de una manera justa e imparcial, o el ejercicio del debido proceso en sus medidas de aplicación.
Cejudo peleará en noviembre en Monterrey, su tercera pelea en UFC y la segunda en México. Esperemos a ver que tiene que decir UFC respecto a la decisión de Henry, ya que, como prospecto sólido a ser campeón de peso mosca, debe haber una solución al respecto que no lo elimine de los carteles por completo.