Por Gladys Trujillo
Guido Cannetti es uno de los personajes más curiosos de ver en el TUF Latinoamérica. A como es mostrado en el reality, es un hombre de muchas palabras y que siempre tiene una opinión qué verter sobre el sobre el tema que se le cuestione.
Cannetti perdió por primera vez contra Marco «Psycho» Beltrán en una polémica decisión dividida que los jueces entregaron al mexicano. Y es que una patada prohibida le cambió el rumbo al «Ninja» y se perdió su pase directo a la semifinal.
Obviamente no se quedó callado y con sus compañeros expuso las razones por las cuales él debió ser nombrado ganador. Y vaya, no hubo quien lo discutiera.
Luego, las circunstancias le dieron una segunda oportunidad. Marlon «Chito» Vera, que se ganó su pase a semifinales con un potente nocáut sobre Henry «Bure» Briones, contrajo una infección en la piel que le causó inflamación de órganos internos. Esto lo relegó de las semifinales y Dana White eligió al argentino como relevo de «Chito».
Como era obvio, Cannetti se subiría a la jaula de manera impetuosa para tratar de imponerse a Alex «Diablito» Pérez y obtener su pase a la final de peso gallo en el TUF. En ese aspecto, Pérez tuvo un desacuerdo con Cannetti. Cannetti quería ser finalista y Pérez no estaba de acuerdo. Así que entre toda esa impaciencia de Guido, ese alud de patadas que no encontraron destino y algunos golpes que sí entraron, Alex supo guardar la calma para acomodarle un certero derechazo en la cara que mandó a la lona a su oponente. Luego le cayó encima para sentenciarlo y el réferi determinó el triunfo del «Diablito».
0 a 2 para Cannetti.
Finalmente, Cannetti habló sobre su segunda derrota en el TUF. Claro, esta vez más difícil que la primera porque ni siquiera tuvo la oportunidad de mostrar su poder,ni de demostrar lo que había dicho a lo largo del reality.
-Espero en la próxima ser frío y hacer las cosas mejor. Acá todo me salió mal. Todos los mejores alguna vez cayeron y así es la vida.- comentó el «Ninja».
Efectivamente, salió mal porque no tuvo control. Buscó el nocáut desde el principio pero jamás imaginó que lo encontraría en su persona.
-Creo que me sentía mal porque no llegué a recuperarme. Eso me hizo estar desconcentrado y por lo que me pasó en la primera pelea con las tarjetas tuve que salir a matarlo. Si hubiera tenido más tiempo entre combate y combate no creo que esto me hubiera pasado.- explicó Guido.
Además cometió el error más fatal de todos: subestimó a su rival. Creyó que el «Diablito» no sería capaz de vencerlo porque había entrenado con él varias veces y no creyó que el mexicano tuviera lo suficiente para ganarle.
-Exceso de confianza.- manifiesta.
La aceptación es el primer paso para cerrar los capítulos malos de la vida para empezar otros con mejor actitud y para poder aplicar lo aprendido cuando todo fue mal. Tal vez esta sea la nueva manera de comenzar de Cannetti, que ahora tiene el tiempo del mundo para prepararse mental y físicamente, con la cautela de una cabeza fría pero la contundencia de un ninja, como es él.