Justin Gaethje acepta plenamente su derrota por nocaut ante Max Holloway en UFC 300, así como las circunstancias que cambiaron antes y después.
Aunque el enfrentamiento era muy esperado, muchos fanáticos y expertos cuestionaron por qué Gaethje (25-5 MMA, 8-5 UFC) aceptó una pelea por el título de BMF con Holloway en la cartelera histórica de este mes en Las Vegas cuando estaba en una posición tan fuerte para una oportunidad por el título de peso ligero de UFC contra Islam Makhachev.
Tanto Makhachev como su entrenador Khabib Nurmagomedov le dijeron a MMA Junkie después de que Gaethje vs. Holloway fuera amonestado que la pelea no tenía sentido. Fue el peor de los casos para Gaethje, porque fue golpeado y luego colocado en el lado equivocado de un nocaut de todos los tiempos cuando Holloway lo derribó cuando solo quedaba un segundo en la pelea.
Como resultado, Dustin Poirier, a quien Gaethje acaba de noquear en UFC 291 en julio, desafiará a Makhachev por el cinturón en UFC 302 el 1 de junio en Newark, Nueva Jersey, y Gaethje está ahora más lejos de una oportunidad por el título de lo que ha estado en años. .
«Creo que mucha gente en mi posición se habría propuesto no aceptar (la pelea con Holloway). No tengo excusas. Me divertí mucho. Creo que fue una cartelera enorme e histórica para UFC, y ser parte de eso, ser la mejor pelea en esa cartelera, vivirá para siempre.
“Era un riesgo enorme. Fallé, y si hubiera ganado esa pelea, si hubiera conseguido un nocaut rápido, habría aceptado esa pelea (contra Makhachev). Pero es sólo el nombre del juego”.
Gaethje dijo que no va a dejar que los “qué pasaría si me devoren” y tiene la intención de seguir adelante con su vida y su carrera. Priorizará la salud y el tiempo en familia antes de decidir los próximos pasos de su carrera.
A pesar de la violenta derrota, Gaethje sigue siendo el número 4 en la última clasificación de peso ligero de USA TODAY Sports/MMA Junkie . A los 35 años y con el daño acumulándose, podría decirse que el próximo capítulo es tan importante como cualquier otro. Y la realidad no se le escapa.
“Ciertamente, la definición de guerra, especialmente que lo pongan a dormir de esa manera, definitivamente cuenta como tal. Pero aún no he terminado. Voy a pelear en el futuro, y esa es la única manera en que peleo.
“Incluso si quisiera cambiar mi forma de pelear, en realidad no es posible. Así es como compito. Así es como he competido desde que era niño. Y así, la próxima vez que entre allí, ‘el mejor show en vivo del mundo’. Veremos si tengo una pareja de baile tan buena como la que tuve (con Holloway), pero mis intenciones serán las mismas”.