De pronto, ciertos analistas se autoproclaman conocedores del arte del «deathmatch» y dicen apreciarlo… a raíz de la sonada victoria de Matt Cardona sobre Nick Gage en GCW Homecoming y el combate que «The King» disputará contra Chris Jericho hoy en AEW Dynamite.
Y es que este 2021, la lucha extrema ocupa numerosos titulares en medios que antes hacían escasa o nula cobertura de ella (curiosamente tras el retiro de Matt Tremont, leyenda de lo «hardcore», el pasado noviembre). No sólo por aquel Kenny Omega vs. Jon Moxley en AEW Revolution, que de pronto abrió los ojos a muchos periodistas y aficionados, sino en buena parte por el trabajo de Game Changer Wrestling y esa merecida popularidad de Gage a estas alturas de su carrera, impulsada gracias también al documental sobre su vida que produjo VICE.
¿Podría convertirse el arte del «deathmatch» en una atracción para el gran público? AEW Revolution fue en su momento el PPV con mejores ventas de la compañía, y supongo que ese mencionado choque explosivo entre Omega y Moxley tuvo bastante que ver.
El Jericho vs. Gage de esta noche quizás suponga otro paso adelante a la hora de normalizar lo extremo, y aunque parece complicado que la televisión nacional estadounidense cambie sus directrices de contenido, al final la rentabilidad dicta sentencia.
► Los prejuicios sobre el «deathmatch», encarnados en Eric Bischoff
Bajo el más reciente episodio de su podcast, ‘83 Weeks‘, Eric Bischoff hizo una curiosa valoración acerca de Nick Gage que no puedo evitar recoger.
«Primeramente, ese estilo de lucha no me interesa. Creo que en general es malo para la industria, creo que atrae a una parte de la audiencia muy pequeña. Lo vimos la otra noche con [Jon] Moxley y el otro tipo que no recuerdo su nombre [Lance Archer]. Se estaban dando con un tenedor. Vale, muy bien, lo que quieran. No voy a ver esa clase de cosas. Primeramente no es entretenido, no hay nada mágico en ello.
«No hay creatividad, sólo es gore y sangre porque sí. Reconozco que es mi gusto personal, no intentar atraer mi atención, así que no critico a AEW por hacerlo. Mi opinión en este caso es desde el punto de vista de alguien que ha estado en esta industria y como espectador. Como espectador, no hay nada que me haga decir, ‘vaya, ¿cómo hicieron eso? Guau, eso fue muy creativo. Me han emocionado como hacía tiempo nadie lo conseguía’.
«Cuando ‘Dark Side of the Ring’ se centra demasiado en esa historia [Nick Gage], creo que la da una mala reputación a la industria. Cuando la gente ve esa clase de cosas se lleva esa imagen de la lucha libre. Esa imagen es perjudicial a largo plazo».
Mi intención al recoger estas declaraciones de Bischoff es mostrar el desconocimiento que en general se destila en la industria «mainstream» sobre el arte del «deatmatch». Una industria que precisamente ha perdido fuelle en los últimos años a causa de su blandura y un exceso de artificialidad, desplazada ante la irrupción de las artes marciales mixtas.
Simplemente recomendar a Bischoff, que dice no ver creatividad ni narrativa en la lucha extrema, que se suscriba al canal de YouTube FMWdojo, que recoge valiosos eventos y documentales en torno a Frontier Martial-Arts Wrestling, la ahora resucitada empresa de Atsushi Onita. O si quiere algo más cercano en el tiempo, eche un vistazo en FITE a la última edición del Tournament of Survival de GCW, celebrado el pasado mes.
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