En 1974, un día como hoy, hace 41 años, el domingo 27 de enero, en la Arena Coliseo, la tercia de técnicos formada por Blue Demon, El Halcón y el español Paco Pardines –futuro enmascarado Lawrence de Arabia— triunfaron ante los rudos Dr. Wagner, Gran Markus y el chihuahuense El Vikingo.
En la Pista Revolución esa misma tarde la arrolladora mancuerna de rudos que venía formando el experimentado Karloff Lagarde con Bruno Victoria ganó la lucha estrella de relevos a Enrique Vera y a Mano Negra.
En la plaza de toros El Cortijo, Aníbal y Black Shadow obtuvieron el triunfo en relevos ante Alfonso Dantés y Rizado Ruiz.
En la Arena Bravo, quien fuera el popular Hombre Bala y posteriormente Monsther, y que en aquellos entonces combatía con el sencillo nombre de Chamaco Ortiz, ganó esa tarde la lucha de apuestas de cabelleras que sostuvo con Gatúbedo I.
Mientras esto ocurría en la capital, en algunas plazas de la república hubo también varias funciones interesantes, entre otras:
En la Coliseo de Guadalajara seguía a todo vapor la tremenda rivalidad entre Ángel Blanco y El Solitario, quienes volvieron a enfrentarse aquella tarde en relevos australianos. El Ranchero Vargas estuvo acompañado por César Valentino y por Iván el Bronco; al enmascarado de oro le secundaron Ciclón Veloz Jr. y Ringo Mendoza. Al final de la contienda surgió el reto para una lucha de máscara contra cabellera entre los acérrimos rivales, y dicho encuentro se celebró la semana siguiente.
En la plaza de toros La Aurora, en luchas de máscara contra máscara, El Búho destapó al Apache Negro.
En la Arena Afición, de Pachuca, hubo duelo titular estelar en el que Tauro retuvo el Campeonato Nacional de Peso Ligero ante su retador enmascarado, Dr. Misterio.
En la Arena Puebla, como casi todos los domingos de aquellos tiempos, se agotaron las localidades, y esta vez se presentó un australiano femenil en el que triunfaron Irma González, Karina y Angélica Galicia sobre Toña la Tapatía, la enmascarada La Vendetta y Charito Silva.
También un 27 de enero, pero de 1956, es decir, hace 59 años, hubo muy buena entrada en la Arena Coliseo con el atractivo de la fusión de luchadores que habían quedado independientes luego que dejó de funcionar P.U.M. (Promotores Unidos Mexicanos, al mando de Jack O’Brien) con los del elenco Lutteroth, y que a partir de esa fecha siguieron trabajando para la Empresa Mexicana de Lucha Libre.
Aquella noche hubo por primera vez aquella lucha llamada “del desempance”, que consistía en una lucha entre preliminaristas que subía después de la estelar con el objeto de “dosificar” la salida del público al término de la función, para reducir las aglomeraciones hacia las salidas. Esa modalidad perduró por dos décadas. En fin, ese “honor” les correspondió en aquella velada a Sheik Mar Allah y al Jaibo García. El triunfo fue para el “árabe”.
En la lucha estrella hubo otro tórrido duelo entre El Santo y Blue Demon, quien obtuvo la victoria cuando el plateado fue descalificado en la tercera caída. En la semifinal entre extranjeros, el español Eduardo Bonada derrotó al inglés Ed Saxon.
En las combinaciones de coliseínos e independientes los resultados fueron: Chale Romero (Ex PUM) derrotó a Joe Marín. Dorrel Dixon superó al Califa (ex PUM). Memo Rubio (ex PUM) ganó al Apolo Sureño. En posteriores funciones se presentaron más ex independientes como Ray Mendoza y Black Killer, entre otros.
