Dustin Poirier ha dejado su huella en la UFC, pero el ex campeón interino del peso ligero, de 34 años, todavía tiene la ambición de competir en el boxeo antes de retirarse.
Me gustaría», dice Poirier sobre competir en el círculo cuadrado en una entrevista reciente en el programa «The MMA Hour». «La primera vez que me puse unos guantes eran de boxeo. Pensé que iba a ser boxeador».
«Me encantaban los deportes de combate. Primero me encantó el boxeo. Veía los combates y me inspiraban, y sabía que lo que esos tipos mostraban ahí dentro, luchando a través de la sangre y las agallas, siguiendo adelante, fuera lo que fuera, sabía que yo lo tenía. Sabía que lo tenía.
«Conocía la lucha en jaula. Mi padre y yo solíamos ver cintas VHS en los videoclubs de toda la vida. Por supuesto que conocía la lucha en jaula, y había luchado un poco cuando era más joven, no sabía nada de jiu-jitsu, pero cuando conocí a esos chicos en el gimnasio de boxeo y empezaron a decirme dónde entrenaban y hacían kickboxing y jiu-jitsu, ese fin de semana siguiente estuve en su gimnasio y nunca volví».
Mirando atrás, Poirier no se arrepiente de esa decisión, aunque también cree que sus habilidades podrían haberle servido en el ring de boxeo.
«Estoy contento de cómo me fue», dijo Poirier. «Creo que me habría ido bien en el boxeo. Sigo pensando que puedo hacerlo bien en el boxeo, pero soy un luchador de MMA«.
Y aunque Poirier alberga claramente la ambición de boxear, parece que no está convencido de que vaya a hacerse realidad.
«Me gustaría antes de que todo acabe, pero no creo que vaya a suceder nunca«, admitió Poirier. «Creo que me quedan como 5-6 peleas más en mi contrato con la UFC.
