Por Gladys Trujillo
Y es que el «Dodger» Montaño entró en un cartel muy importante de la historia en su debut. UFC 180 fue la oportunidad perfecta para este peleador mexicano que ha sido definido como el prototipo del peleador mexicano, el que le abrirá las puertas a todos los demás. Dicho esto por su compañero y amigo del gimnasio Bonebreakers, Juan «Fénix» Puig.
Todos los elementos se alinearon para que el «Dodger» se pusiera tono e hiciera un buen papel:
Su debut, en México, en su casa y en el primer evento de UFC realizado en México. Lejos de sentirse intimidado por esas condiciones, se sintió impulsado por la energía del público.
Se subió seguro e imponente al octágono ante Chris Heatherly, con una pelea más de experiencia que Montaño en UFC. Antes de eso, tenía una marca de victorias y una derrota fuera de UFC. En su debut con la empresa cayó ante Ben Saunders.
Así que es probable que la presión estaba del lado de Heatherly.
Pues bien, el «Dodger» entró con todo y soltó de inmediato los golpes. Heatherly pudo cazar a Montaño y llevarlo al piso, pero a pesar de que el estadounidense le ganó la posición, Montaño logró salir.
De ahí el desenlace fue cosa de tiempo. Un encierro contra la jaula, donde Heatherly quedó encorvado y Montaño le lanzó rodillazos en la cabeza y en la zona blanda. Un gran número de rodillazos le entraron al cuerpo a Chris y «Big John» decidió que el castigo había sido suficiente.
Paró la contienda a 10 segundos del final del primer tiempo.
El resultado fue efectivo, «Dogder» Montaño noqueó en su debut en UFC 180 y se proyecta como una de las promesas mexicana de las artes marciales mixtas en UFC.