Pregunte a un fan de UFC sobre la mejor época de la historia de la promoción y obtendrá respuestas muy variadas.
Para Dan Hardy, antiguo aspirante al título del peso welter de la UFC, un punto dulce es la época en que la UFC acababa de pasar página bajo la propiedad de Zuffa LLC, que compró la decadente promoción de las MMA en 2001 por 2 millones de dólares.
Los luchadores eran grandes personalidades con historias únicas. Hardy desea esos días ahora que mira el deporte fuera de los confines del empleo con la UFC. Así lo dijo Hardy a MMA Fighting:
«Todo el mundo parece un clon del otro. En un momento dado, era un mercado libre, tenía a Earache Records patrocinándome, tenía un montón de empresas más pequeñas que tenían un poco de presupuesto de marketing que podían apoyar a su luchador favorito, y luego llegó ese impuesto de patrocinio. Y se diluyeron un poco, y todos perdieron un poco de dinero.
«Luego vino la siguiente etapa, en la que se eliminaron las pancartas, y fue una constante exprimir la vida, y esa es la parte que duele tanto. Porque estos chicos que vienen ahora, la idea es cómo me protejo y juego el juego y hacer la mayor cantidad de dinero. Si miras atrás, a los viejos días de Nick Díaz contra Robbie Lawler, estaban allí por amor, por el honor, por el privilegio de estar ahí y mostrar de lo que eres capaz. Y no sé, parece que ahora nos estamos alejando un poco de eso».
► Cómo debería ser las MMA de hoy en día, según Dan Hardy
Para los luchadores nuevos y veteranos que Hardy observa día a día, ve una lucha similar por encontrar una base sólida sobre la que construir o mantener una carrera.
«He tenido una relación de altibajos con la UFC a lo largo de los años, porque cuando firmé por primera vez con la UFC, pensé que éramos una familia en las MMA y que todos caminábamos hacia lo mismo. Y esos discursos que el presidente de la UFC Dana White solía dar después de los pesajes, salías de la sala con el brazo alrededor de tu oponente, diciendo: ‘Vamos hombre, vamos a dar un gran espectáculo mañana para los fans’. Así es como te hacía sentir»
«Pero en cuanto peleé con Georges St-Pierre, me di cuenta de que me habían dado prisa porque faltaban contendientes. Conseguí esa pelea pero mirando hacia atrás, es vergonzoso lo que me pagaron por esa pelea, lo que di y lo que me costó pelear.
White ha explicado repetidamente el enfoque de la promoción como una supervivencia del más fuerte, una consecuencia de la interminable búsqueda de los luchadores más malos del planeta. La liga de leyendas, sugerida por varios veteranos de las MMA, no forma parte todavía del modelo de negocio, como tampoco lo son los combates novedosos que acaparan los titulares.
A Hardy le gustaría que hubiera espacio para los novatos y los veteranos a la hora de exponer sus habilidades al resto del mundo. Para él, eso significa recorrer su propio camino fuera de la UFC mientras avanza hacia la siguiente etapa de su carrera.
Es decidir quién estará de acuerdo con su visión para promocionar a sus luchadores, o al menos le ofrecerá el tipo de compensación que no le haga sentir que se va con más de lo que llegó. No sólo quiere demostrar al mundo que sigue siendo un gran luchador, sino que sin duda quiere evitar la precipitada caída de muchas leyendas antes que él.
