Conor McGregor es un chico talentoso, poderoso y muy, pero muy seguro de sí mismo. Ha vaticinado todas sus victorias desde que llegó a UFC y no pierde la oportunidad de decir que es cuestión de tiempo el que se convierta en campeón de peso pluma. Un corto plazo según sus planes.
El último año lo pasó hablando de cuán grandioso es y su plan para conquistar el título que actualmente está en manos de José Aldo.
Para su próxima pelea, frente a Dennis Siver en UFC Fight Night 59, McGregor pronostica acabar temprano y le pone límite de tiempo. Considera que Siver no pasará de los 2 primeros minutos de combate, aún cuando le reconoce su maestría en kick boxing y taekwondo, pero aún así confía en salir con la victoria.
-El 18 de enero, presiento que acabaré con Dennis Siver en los primeros dos minutos. Ya he pensado en algunos de los posibles escenarios y no lo veo escaparse de los primeros dos minutos. Es un veterano, es un experto de kickboxing, un experto de taekwondo, y es también el competidor más experimentado al que me he enfrentado. Pero presiento que en dos minutos conseguiré despacharlo y eso me dará la entrada a una pelea en Irlanda.- comentó Conor.
Refiere que sólo tendrá que aplicar la misma estrategia con la que entró por primera vez al octágono. Y tal vez la consistencia con que enfrenta sus combates es que ha conseguido sus victorias aunque sabe, que esta vez ya no es el «peleador en desventaja» sino el favorito.
-He estado haciendo esto desde que pise por primera vez el octágono, sólo que en mis peleas anteriores se dijo que mis oponentes iban a vencerme. Se suponía que Dustin Poirier debía vencerme, lo mismo con Diego Brandao y Max Holloway. La única diferencia en esta pelea es que todos esperan que gane. Estoy agradecido de que los aficionados piensen eso, ellos lo ven claro… nadie se puede meter en mi camino.- comentó McGregor.
Y de ahí, un pase directo por el cinturón pluma UFC de Aldo.