Julio César Chávez Jr. aún no tiene fecha de regreso al ring. Desde el primero de marzo de 2014, donde derrotó a Brian Vera, no visto más actividad. Parece repetitivo, pero así son los pleitos legales. Julio no ha visto la suya y se ha perdido de peleas importantes contra Gennady Golovkin y Carl Froch.
Bob Arum y él están en desacuerdo. Arum no quiere dejar ir al Junior y menciona que está bajo contrato activo, pero no le quiere dar más dinero. Chávez quiere más dinero y dejar Top Rank. Ya había dado un paso al lado y anunció su firma con el poderoso asesor Al Haymon. Y eso no impidió que Top Rank tirara la pelea que se le había conseguido contra Carl Froch, programada para marzo.
Ahora está en el gimnasio mientras sus abogados libran esa pelea. Mientras tanto, se la pasa en el gimnasio en lo que obtiene la luz verde para volver a boxear. Eso sí el boxeo nunca está lejos de su mente, ahora desde el lado del aficionado y de lo que espera del los boxeadores élite en este año.
Chávez Jr. propone peleas para 2015, peleas que pueden ser un poco más viables de las que se han propuesto hasta hoy: Mayweather contra Pacquiao no está cerca de suceder y Cotto contra Álvarez está estancada en las negociaciones.
Así que a él le gustaría ver a Miguel Cotto en revancha con Floyd Mayweather y a Saúl Álvarez contra Manny Pacquiao. Tal vez habría muchos menos problemas y obstáculos para sellar un combate entre Saúl y Manny, más ahora que Top Rank (promotora de Pacquiao) y Golden Boy (promotora de Álvarez) ya hicieron las pases y se han comprometido al trabajo conjunto.
Por otra parte, ya que Mayweather le dio la revancha inmediata a Marcos Maidana, bien podría concederle una a Miguel. Sería una pelea interesante que seguro atraería mucha atención.
Pero ya nos salimos del tema. Regresemos a Chávez Jr. que cuando parecía que se acercaba su regreso al ring se vio truncado. Sin embargo, eso no le quita la idea de enfrentarse a Gennady Golovkin y tratar de ser campeón mediano por segunda vez y/o enfrentarse a Carl Froch para tener la oportunidad de convertirse en el primer campeón súper mediano mexicano.