Canelo cumplió con su apuesta de donar su barba a cambio de un donativo.
Hace un par de meses, Saúl recibió el reto de una pequeña bailarina llamada Alexa, quien le pidió apostar su barba a cambio de un donativo. Este dinero se enviaría a Nariz Roja A.C., una asociación que se dedica a ayudar a niños y mujeres con cáncer.
Canelo le puso un precio a su barba de medio millón de pesos para sumar donativos. Luego se comprometió a duplicar la cantidad si se llegaba a la meta antes del 31 de diciembre. El anuncio de Saúl se hizo el 19 de noviembre.
Para el 4 de diciembre ya se había recolectado el medio millón de pesos. El campeón mexicano garantizó el doble de lo recaudado. Pero faltaban muchos días para que cerrara la campaña, por lo que se llegó a una meta mucho mayor.
Esta semana, una vez pasada la euforia de su triunfo ante Rocky Fielding, una vez pasadas las fiestas de fin de año, Canelo cumplió con su apuesta y se quitó la barba para finalizar el reto.
Alexa, la nena que le lanzó el desafío, estuvo presente para atestiguar que Álvarez se quitara la barba y sellara el pacto.
Muchos otros niños que son del grupo Invencibles, que reciben apoyo de Nariz Roja, estuvieron presentes y convivieron con Canelo, como apoyo moral para combatir las enfermedades que los aquejan.
El dinero que recaudó Canelo será destinado a la creación de un segundo albergue para las personas que reciben el recurso de Nariz Roja.
Canelo cumplió con su apuesta y a la vez, retó a Julión Álvarez con su cabello para sumar otro donativo importante. El punto de estos retos es que llegue al mayor número de personas posible, con gran proyección y así se sume más dinero de manera más eficiente.
Nota al pie: se podrá decir lo que sea de Canelo, pero no que incumple con sus promesas.