El veterano peso ligero de UFC y finalista de The Ultimate Fighter 15 , Al Iaquinta, se inclina hacia el retiro después de su tercera derrota consecutiva en el octágono.
Iaquinta, quien fue detenido por Bobby Green en UFC 268 , anunció «Estoy pensando que eso es todo, hombre» en su podcast de video Call Me Al, agregando una carrera de entrenamiento duro y sus acciones en su pelea más reciente indicaron que no podía competir más.
“Esa es la forma de salir. Quiero decir, obviamente, quieres salir a ganar, pero esta mierda no vale la pena, amigo. Viste a Michael Chandler y Justin Gaethje pelear. Esos tipos, se golpearon el uno al otro. Eso no valió la pena».
“Para ser honesto contigo, no lo sé. Fue la primera pelea en la que realmente me rendí. Él no me dejó inconsciente, y me di la vuelta y me cubrí. Todavía estaba consciente; Sabía lo que estaba haciendo. Pero yo solo quería salir. Eso fue todo. Me di cuenta de que me golpeó fuerte, probablemente no iba a ser una buena noche para mí. No confiaba en mi preparación, en mi cardio, en mi lucha.
“Estos muchachos están entrenando duro. Estos muchachos entrenan tres veces al día, dos veces al día, muy duro. Mi cuerpo ya no puede soportar eso. Esa es la primera vez en mi carrera que me rindo en una pelea «.
Iaquinta no pareció anunciar oficialmente su retiro después de su 15a aparición en UFC. Sin embargo, el luchador de 34 años ha girado hacia una segunda carrera en el sector inmobiliario y ha promocionado los beneficios de usar su celebridad para vender propiedades.
Con 1-4 en sus cinco apariciones más recientes, el deslizamiento de Iaquinta comenzó con una pelea por el título con muy poca anticipación en UFC 223 contra el ahora retirado campeón Khabib Nurmagomedov . Iaquinta recibió elogios por su valiente actuación y su aumento tardío. Pero en apariciones posteriores perdió en las tarjetas de puntuación dos veces después de rebotar contra el único retador interino al título Kevin Lee , y su derrota ante Green marcó la primera en una carrera profesional de 12 años por detención debido a strikes.
Una figura abierta fuera del octágono, Iaquinta se ha enfrentado repetidamente con el UFC por el pago, y se desempeñó como secretario y tesorero del advenedizo Project Spearhead, que tenía como objetivo forjar un acuerdo de negociación colectiva entre los luchadores y el UFC.
Dentro del octágono, Iaquinta nunca se mordió la lengua e hizo fanáticos por su entrevista sin filtro posterior a la pelea después de una victoria sobre Jorge Masvidal en un evento de UFC 2015.
El récord de Iaquinta en UFC es de 9-6. Debutó en el octágono después de llegar a la final del TUF 15, perdiendo por sumisión ante el ganador Michael Chiesa.