UFC Fight Night 250 marcará la primera vez que Israel Adesanya compita en una pelea sin título en casi seis años.
Adesanya (24-4 MMA, 13-4 UFC) se enfrentará a Nassourdine Imavov (15-4 MMA, 7-2 UFC) en el evento principal del sábado en el ANB Arena en Riad, Arabia Saudita. El ex campeón de peso mediano de UFC ha estado en la carrera por el título desde 2019, pero actualmente se encuentra en un territorio desconocido tras haber perdido peleas por el título consecutivas contra Sean Strickland y Dricus Du Plessis.
“The Last Stylebender” insiste en que su motivación no ha flaqueado.
“Sólo porque no hay un cinturón en juego, no quiero restarle importancia a esta pelea. Esta sigue siendo una pelea importante para mí. De nuevo, digo que estoy haciendo esto por mí mismo. Estoy siendo un poco egoísta.
“Lucho por mí mismo, por mi equipo, por mi familia y por mis verdaderos fans, pero en esta ocasión me pongo a mí mismo en primer lugar. Intento hacerlo por mí mismo, así que es muy importante para mí”.
Adesanya intentará frenar a un contendiente joven y en ascenso como Imavov.
“Por lo que he visto hasta ahora, no hay nada que él aporte que yo no haya visto antes. Creo que su mejor atributo es su velocidad. Su velocidad, sus contraataques, pero eso ya lo he visto antes. Una vez más, depende de él mostrarme algo que yo no haya visto antes”.
El ex dos veces campeón de peso mediano de UFC se niega a mirar más allá de Imavov y trazar planes para el futuro, pero confía en que su legado ya está escrito en piedra, independientemente del resultado.
“Al principio dije ‘guardián’ como una broma. Sí, me siento como el perro viejo y luego están los jóvenes que vienen tratando de demostrar su valía. Así que es mi trabajo enviarlos de regreso y hacerles saber que todavía estoy aquí.
“Dios no lo quiera, si pierdo mis próximas 10 peleas, no afectaría mi legado. Así que me presiono a mí mismo, no me malinterpreten. Cuando llegue el momento, me presionaré a mí mismo. Si él no siente la presión, bien por él, pero ya se dará cuenta”.