WWE está intentando ofrecernos buenos shows semanales desde el anuncio de la separación de marcas, y a partir del último cambio de campeón máximo esto parece acentuarse, con más o menos fortuna. El primer Raw post-Money in the Bank dio grandes datos de audiencia y muchos esperábamos que Ambrose presentase sus credenciales como hombre que podía liderar un cambio y a la vez resultar bueno para los negocios. Pero los ratings han ido cayendo progresivamente en las dos últimas semanas, y las dudas y críticas hacia el luchador empezaron a surgir, resumidas en el excelente artículo de José Manuel Vergara. Aunque como siempre, hay que ser prudentes.
Parece que la situación se presenta seria ante la inminente llegada del 19 de julio, la fecha más importante en la historia reciente de la compañía. Si continúan las malas cifras podríamos estar ante la gran oportunidad perdida de Ambrose y su presumible caída definitiva a los puestos secundarios. ¿Otro cambio de monarca sería la solución? Creo que ni siquiera los más expertos analistas conocen la respuesta.
Y ante esto, Vince McMahon hará su regreso el próximo lunes, en lo que sin duda es otra tentativa por frenar la desbandada de televidentes. Dos meses después, de nuevo el chairman toma cartas en el asunto, sabiendo que aún conserva un suficiente halo de atractivo para que el universo WWE esté atento a sus posibles designios. Pero además de su presencia, se han anunciado dos interesantes combates y uno posible de bastante relevancia para la edición de Raw del 11 de julio.
Publicamos ayer en SÚPER LUCHAS que los creativos planean una rivalidad entre Rusev y Zack Ryder en torno al Campeonato de los Estados Unidos. Pues bien, sin más dilación, un careo entre ellos se llevará a cabo en el próximo show rojo, constituyendo el primer capítulo. No se ha confirmado si finalmente se plasmará en un combate titular, pues aunque Ryder lanzara el reto por twitter, el propio Rusev ha demandado un desafío cara a cara. Algunos medios como Wrestling Observer, sí insinúan su realización. ¿Vivirá otra gran momento Ryder en SummerSlam o sólo será un oponente de transición para Battleground? Los buenos números que genera el neoyorquino podrían conducirlo hasta el mayor evento del verano.
Por otra parte, Sasha Banks y Dana Brooke se verán las caras como construcción del ángulo entre la primera y Charlotte. A priori, no supone un duelo muy interesante por la poca calidad luchística de Brooke, sí siendo mínimamente curioso en cuanto a observar la evolución en el ring de la futura Roman Reigns femenina, según rumores que indicaban la intención del señor McMahon. Y tal vez será una previa de lo que nos espera dentro de un tiempo prudencial bajo la órbita del Campeonato Femenil WWE.
El último encuentro anunciado es una batalla campal para determinar el aspirante número uno al Campeonato Intercontinental WWE. Hay que remontarse a Extreme Rules para conocer la última defensa de este título en un PPV: aquel genial Fatal 4-Way que ya se ha posicionado entre lo destacado del 2016. Cesaro y Kane fueron los más recientes retadores, ambos en ediciones de SmackDown y Raw respectivamente. De nuevo, puede que de cara a la importante cita de Battleground, la primera relevante tras el Draft, se estipule una lucha con el histórico cetro en juego, y de esta batalla campal salga el oponente de The Miz.