La colaboración entre WWE y TNA ha capturado la atención de los fans de la lucha libre. Como era de esperarse, comenzaron las especulaciones sobre la posibilidad de una colaboración similar entre AEW y WWE, comparable al evento Forbidden Door.
Algo así sería un hito histórico. Sin embargo, existen varios obstáculos que hacen que sea prácticamente imposible.
► En primer lugar, la relación entre WWE y AEW no es la mejor
A pesar de que Tony Khan, presidente de AEW, ha manifestado en varias ocasiones su disposición a colaborar con WWE, esta última no ha mostrado el mismo interés. De hecho, WWE ha llegado a filtrar información falsa sobre los ratings de AEW, una táctica que evidencia la tensión y la competencia feroz entre ambas empresas. Esta rivalidad no solo dificulta cualquier intento de colaboración, sino que también refuerza la percepción de AEW como una amenaza directa al dominio de WWE en el mundo de la lucha libre profesional.
Además, históricamente, WWE no ha tenido una buena relación con otras empresas. La mayor parte de sus alianzas fueron en la época en la que Vince McMahon no estaba a cargo. Una vez que éste le compró a su padre la compañía, se dedicó a absorber talento y recursos de la competencia. Obviamente, con ello se generó una desconfianza generalizada, haciendo que otras empresas sean reacias a entrar en acuerdos que podrían dejarles en desventaja.
► Otra barrera es la filosofía de ambas empresas
WWE ha construido su imperio en torno a su marca y su estilo de ‘entretenimiento deportivo’, mientras que AEW se ha posicionado con un enfoque más centrado en la lucha libre pura y el respeto a la tradición del deporte. Estas diferencias no solo crean un abismo en términos de visión empresarial, sino que también complican la logística de organizar un evento conjunto que satisfaga las expectativas de los fans.
A pesar de estos desafíos, la idea de un mega-evento entre AEW y WWE sigue siendo un sueño para muchos. Los elencos de ambas empresas están llenos de talento. Sin embargo, este sueño probablemente permanecerá en el ámbito de la fantasía.
