Vasyl Lomachenko retuvo sus campeonatos de peso ligero por decisión unánime ante el británico Luke Campbell.
El campeón ucraniano expuso sus cintos de la AMB y OMB, al mismo tiempo que el CMB puso en la línea su propio cinturón, que estaba en calidad de vacante.
Campbell subió como un serio contendiente a derrotar a Lomachenko por su notable ventaja de dimensiones físicas. Loma es más bajito y tiene menos alcance que Campbell. Pero en otras ocasiones se ha visto cómo Loma les corta la distancia, aquí la variante debió ser lo que el británico haría para defender su espacio.
Y bueno, no logró mucho.
Aunque no se puede decir que no lo intentó. Sí pudo de inicio hacer que Loma se mantuviera lejos de él, haciendo fintas y trabajando hacia atrás. Pero Lomachenko trabaja muy bien las distancias, no le llevó mucho tiempo descubrir qué tan lejos debía estar de Campbell.
En cuanto lo hizo, le metió la habitual velocidad que utiliza para repartir sus golpes en combos de cuatro impactos para hacer resentir el castigo al rival. Campbell de inicio resistió muy bien, estaba a las vivas y en buena posición de ataque, pero apenas le entraron los golpes de poder a la cara empezó a retroceder.
Él se echaba para atrás, pero Lomachenko encontraba los pasos precisos para acortar el espacio y entrar con golpes. La manera en que empezó a doblegar al británico fue cuando le lanzó varias derechas al rostro. Campbell quiso responder con golpes al cuerpo.
Sí, encontró una ruta para empezar a colocar castigo en Loma, pero no fue tan frecuente como necesitaba para vencer. Loma en cambio se molestó, emprendió la carga y le lanzó ráfagas de golpes que Campbell apenas pudo cubrir. Eso en la altura de la mitad de la pelea.
Habrá qué decirlo: Campbell sí sacudió a Loma en algunas ocasiones, lo hizo rebotar en piernas para salir del embrollo, pero le hizo falta consistencia y volumen de golpeo para que ese ataque pudiera ser efectivo para acabar con el ucraniano.
A su vez, cada ataque de ese tipo le aumentaba el poder a Lomacheko, quien regresaba con más golpes y más fuerza, tanto así, que logró derribar a Campbell en el onceavo, pero no logró tocarlo más para acabar en definitiva el combate.
La pelea se fue a los 12 rounds con el resultado irrefutable: Vasyl Lomachenko retuvo sus campeonatos y obtuvo uno más de manera unánime.