Durante varios días, un buen número de miembros de la comunidad luchística de internet soñaron despiertos con la posibilidad de que Shane McMahon fuese ese agente libre que diera un portazo a su antigua empresa para firmar con AEW este miércoles. Especialmente, a raíz de que Ric Flair abriera la veda exponiendo que la salida del primogénito de Vince McMahon era una historia urdida por WWE.
Y no, finalmente no asistimos a una nueva traición de Shane al estilo de aquella compra de WCW revelada durante el último Nitro. Y es que sólo como parte de un «crossover» podríamos ver realmente al ex Campeón de Parejas SmackDown en AEW, pues este carece de intenciones de trabajar para la competencia de WWE, compañía de la que no es accionista ni para la que actualmente trabaja, pero a la que más pronto o más tarde acabará regresando, luego de su truncado programa de cara a WrestleMania 38.
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► Tony Khan, dispuesto a descolgar el teléfono
Si Sports Illustrated hizo previa del episodio de Dynamite de esta semana mediante una entrevista a Tony Khan, el medio estadounidense repitió praxis tras el show, con un Justin Barrasso planteando la posibilidad al «Chairman» de AEW de que, motu proprio, Shane McMahon decidiera cruzar la «puerta prohibida» algún día. Y Khan quiso mostrarse moderadamente realista.
«Sin duda contestaría la llamada. Estoy seguro de que sería una persona interesante con la que hablar de lucha libre. No estoy seguro de si encajaría. No he escuchado nada de su parte y no espero escuchar nada de su parte, pero en este negocio nunca se sabe».
SHANE-O-MAC = BACK.#RoyalRumble @shanemcmahon pic.twitter.com/zhqSze9Cgu
— WWE (@WWE) January 30, 2022