El excampeón mundial de AEW Swerve Strickland explica cómo el público mexicano transformó el evento Grand Slam con CMLL en una experiencia inolvidable. Además, destaca el papel clave del «Hangman» Adam Page y reflexiona sobre el respeto cultural en la lucha libre.
► AEW y CMLL en Grand Slam: México
“Fue tan… honestamente, tan extraordinario como los fans nos permitieron sentirlo, ¿sabes a qué me refiero? Fueron los fans quienes hicieron que se sintiera como un momento monumental, mucho más de lo que nosotros mismos esperábamos. Creo que ninguno de los luchadores del show, ya fueran parte de All Elite Wrestling o de CMLL, esperaba una recepción tan increíble como la que obtuvimos del público. Ellos elevaron todo al máximo nivel. Hicieron que el show fuera mucho más disfrutable, no solo para la gente en la arena, sino también para los que lo vieron desde casa, quienes estaban literalmente pegados a la pantalla, emocionados, atrapados en la acción y en la atmósfera.
Ver la ovación que recibió Místico y su combate con MJF fue irreal. Te hacía valorar aún más a las superestrellas. Te hacía apreciar ese momento aún más. Y después, al escuchar todas las reacciones, los comentarios y lo que la gente decía tras ver y disfrutar el evento, nos hizo valorar aún más el haber podido presentarnos en esa arena. Porque, por mucho que signifique para nosotros como luchadores, significa aún más para los fans el poder apreciar y comprender el significado de lo que creamos con AEW y CMLL haciendo lo que hicimos. Hacer un Grand Slam así.
Honestamente, él (‘Hangman’ Adam Page) era el hombre adecuado para el trabajo, independientemente de si yo iba a ser campeón mundial llegando a All In, o si lo iba a ser Jon Moxley. Él siempre iba a ser el indicado. A pesar de toda la historia que hay entre él y yo, más como competidores que como personas, siempre ha sido el tipo correcto para esta situación. Por eso fui tras él desde el principio. Nada de su posición en la empresa ha cambiado nunca, y ese fue el punto que quise dejar claro cuando lo enfrenté tras All Out, después de que ganara el Battle Royal benéfico. En Dynamite, fui directo y le dije: ‘Amigo, ¿por qué estás en esta posición? Sabemos quién eres y de lo que eres capaz. Y si ya no crees que eres lo suficientemente bueno, muévete del camino, porque yo voy a tomar tu lugar’. Aunque fue un reto, también fue un reconocimiento. Reconocí que él es ese tipo, siempre lo ha sido, siempre ha sido el protagonista de All Elite Wrestling. Por eso fui tras él. Y ahora que fue quien abrió el show, haciendo una promo de más de cinco minutos completamente en español, en el idioma del país anfitrión, eso demuestra el respeto que él tiene por los fans.
También demuestra que AEW aún lo considera ese tipo, el portavoz ideal para abrir el evento y decirle a CMLL y a Arena México: ‘No venimos a tomar el control de su empresa, venimos como invitados a su casa, y lo apreciamos’. Él es la persona perfecta para transmitir ese mensaje con ese apretón de manos simbólico al inicio del show. Ha sido ese tipo desde el día uno, y lo sigue siendo casi 300 episodios después de Dynamite.”