El 31 de marzo, durante la ceremonia de inducción al Salón de la Fama de WWE, varias figuras luchísticas fueron exaltadas y a partir de ese momento pasaron a formar parte de esa histórica lista de honrados.
Dentro de la categoría de Legacy, fue incluido Rikidozan, el histórico luchador japonés considerado como el «Padre del puroresu«, quien con su particular estilo y visión sentó las bases de la lucha libre profesional que actualmente se practica en Japón.
El pasado fin de semana, la familia de Rikidozan se reunió en el templo de Ikegami Honmonji en Tokio, donde se encuentra su tumba, para conmemorar el ingreso del gladiador al Salón de la fama de WWE.
En el acto estuvo presente Hiroomi Tokumasu, director de marketing de WWE en Japón, quien hizo la entrega a Mitsuo Momota, hijo de Rikidozan, del trofeo que marca este ingreso.
Además se contó con la asistencia de luchadores emblemáticos, como Shodai Tiger Mask y el director Takeshi Kitano; así como Chikara, el hijo de Momota, también conocido en el ambiente luchístico como Rikidozan III.
Tokomatsu indicó que a nombre de WWE se sentía muy contento de dar la bienvenida a Rikidozan a esa prestigiosa lista del Salón de la Fama, ya que la contribución del luchador japonés a la lucha libre profesional, no sólo en Japón, sino a nivel mundial era invaluable.
Antes que Rikidozan, ingresaron al Salon de la Fama, en 2010, Antonio Inoki y en 2015 Tatsumi Fujinami, por lo que Mitsuhiro Momota (su nombre real) es el tercer luchador japonés en conseguir esta distinción, pero el primero en la categoría de Legado.
Mitsuo Momota, por su parte, dijo que para su familia era un honor esta distinción hacia su padre, que en este año cumple 54 años de su fallecido, reconociendo sus logros y trabajo en pro de la lucha libre.