En el más reciente especial de NXT sucedieron muchas cosas interesantes y polémicas, como la inesperada trifulca que armaron tres de los luchadores de la marca amarilla o las palabras de Sam Roberts durante el kickoff sobre Bianca Belair.
“No es digna de TakeOver. Bianca Belair… Es una buena atleta, pero miren la lista de campeonas. Está Shayna Baszler, Charlotte Flair, Sasha Banks, Asuka, Kairi Sane. Es una lista de luchadoras de élite. Y Bianca no está ni cerca de esa lista».
La luchadora, que fue vencida en su lucha por el Campeonato Femenil NXT, no dudó en responder:
“El Sr. Sam puede decir lo que quiera, porque literalmente acabo de llevar a Shayna al límite. Así que, señor Sam, puedes besarme el trasero (…)».
El tema quedó ahí por el momento, al menos para los aficionados. Esto comentó Roberts en su podcast Not Sam Wrestling:
«WWE me lleva a esos eventos y me piden que dé mi opinión sobre las cosas. Ese día lo que dije no fue porque me lo dijeran a través del auricular. Sé que es una de las teorías. Nunca me han dicho nada en el oído. No me trajeron para que dé la opinión de otras personas; no soy bueno haciendo eso. Me piden que sea yo mismo y dé mi opinión.
«En ese momento tuve una crisis de conciencia. Sentí que estaba actuando de acuerdo a lo que me pidieron, así que compartí exactamente cómo me sentía. Mark Henry comenzó una campaña diciendo que le debo una disculpa a Bianca Belair. No me voy a disculpar con Bianca Belair, porque mi opinión es mi opinión.
«Después del show tuve discusiones con algunas personas sobre lo que dije. Lo dije para que los aficionados sepan lo que pienso. ¿Estaban todos encantados con eso? No. A eso me refiero con discutir. Pero son cosas de las que tal vez no quiero hablar en este momento. Veremos cómo va todo».
Creemos que Sam Roberts tiene razón. Si lo contrataron con libertad de hablar, tiene todo el derecho de criticar. En cuanto a Belair, debería aceptar las críticas y aprender de ellas. Finalmente si es receptiva puede crecer, y eventualmente callar bocas no con palabras, sino con hechos.
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La cagó cuando metió a Shayna en esa lista y dijo que es una «luchadora de elite».
Tiene razón pero ya lo empezarán a llamar racista estos ne g ros llorones
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Shayna y el resto de UFC de segunda son la letra pequeña del contrato de Ronda
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No veo porque censurarle su opinión, es válida como la de todos, aunque sea un don nadie.
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