Pedro Campa retoma su camino del triunfo. Hace dos peleas fue noqueado y ahora parece retomar ritmo.
La noche del sábado 30 de junio, enfrentó a Domicio Rondón en un combate que no llegó al final de los rounds que se pactó.
Campa arriesgó el físico aunque su rival no era más talentoso que él, pero dio un toque de dramatismo a su triunfo a pesar de ser el dominador.
Algo que tiene este hombre es poder en las manos y muchas ganas de ir al frente.
Esto coordinó perfecto con un rival que se quedaba en la línea de ataque, que parecía buscar los puños de Campa.
Rondón sí trató de encasillar a Campa para castigarlo, pero su ataque fue deficiente y no logró mantenerlo neutralizado.
Al contrario, tenía muchos espacios que lo hicieron caer en las combinaciones de fuerza de Campa y ahí se veía sin estrategia. O la que llevaba se desbarataba.
A Campa le falto movimiento de cintura. Siendo el más habilidoso sobre el ring parecía que no iba a salir muy herido.
Pero la sorpresa llegó en cuanto se le vio sangre en el párpado izquierdo, alrededor del tercer round.
Debió lidiar con herida y con un rival que si bien no conectaba mucho, sí era incómodo porque lo tenía todo el tiempo encima.
Tan encima que le provocó el corte por cabezazo.
Se entiende que el choque fue accidental porque en el quinto round se detuvo el combate y se tomó a consideración las tarjetas de los jueces.
Es que Campa ya no podía seguir en el combate con una herida así y por reglas, debían revisarse las calificaciones de los jueces.
Este panorama benefició a Campa, quien se fue con el triunfo de la noche, en busca de encumbrar su carrera una vez más.