Faltan adjetivos para describir a The Rock. Lo ha hecho todo en WWE (no hablaremos de sus éxitos como actor o empresario) y en el presente sigue protagonizando momentos para la historia. Ahí va a permanecer para siempre que él llevara a John Cena al lado oscuro convirtiéndose en villano traicionando a Cody Rhodes durante Elimination Chamber 2025 a falta de mes y medio para que ambos se enfrenten por el Campeonato Indiscutible en WrestleMania 41.
► Más que una Superestrella
¿Con qué más podrá impactar en el futuro? No se sabe, pero lo hará. Antes, nos hacemos eco de la descripción que le da Rikishi mientras habla en su pódcast, Off The Top:
“Hablemos del Jefe Final, hablemos del Grandioso. Hablemos de la gran atracción de taquilla. Hablemos de un tipo que, cada vez que pone su nombre o simplemente aparece en la pantalla, genera millones y millones de seguidores. Quiero decir, hace explotar todo. Así que, ¿sabes qué? Lo que The Rock quiere, The Rock lo consigue. Pongámoslo así.
Al final del día, The Rock está más allá de ser una superestrella. Es que bien podrías llamarlo un dios. Bien podrías llamarlo dios, porque cualquier cosa a la que le ponga su nombre o su cara… vamos, todos los inversores están felices, todos los patrocinadores también. Netflix está vuelto loco por tener al Grandioso en sus filas.
Aquí está la cuestión: este tipo… si hablamos de perfeccionar su oficio, escuché esa promo y simplemente llevó a todos en un viaje».
