Ric Flair dice haber estado bebiendo cada noche antes de su último combate

«My Way», la célebre canción popularizada por Frank Sinatra, podría servir perfectamente de banda sonora de la vida de Ric Flair. Y es que el veterano gladiador, a sus 73 años, protagonizará esta noche su aparentemente último combate, pese a su importante historial médico y el hecho de que lleva desde 2011 sin calzarse las botas. 

Flair dice no hacerlo por dinero, sino por la gloria, esa palabra tan propia de guerreros de tiempos pretéritos que llega hasta nuestros días pasada por el filtro moderno, desestimando la importancia de una entidad superior o una patria. El actual «kleos» supone más que nunca un concepto individualista. Aunque esperemos, eso sí, Flair no dé su vida por ello; gesto fútil realmente, pues el veterano hace tiempo pasó a los anales. 

@RicFlairNatrBoy

 

► Richard Morgan Fliehr reverdece a Ric Flair

La preocupación por si «The Nature Boy» saldrá de una pieza de este «Last Match» está siendo, irónicamente, motor para que muchos seguidores sigan hoy de cerca tal acontecimiento. Caso que recuerda al de la última pelea disputada por Muhammad Ali en 1981, con el legendario púgil pasado de peso y visiblemente aquejado ya de la enfermedad de Párkinson. 

Y como Ali, Flair renuncia a en todo momento a que asome la persona detrás del personaje. Sólo así se entienden sus recientes declaraciones bajo entrevista con TMZ Sports, con las que «The Man» quiere vendernos que está hecho un chaval de cara a su canto de cisne. 

«No le he preguntado a ningún médico desde que empecé a entrenar. Nadie me ha dicho que no. Aparte de ser tratado por la fascitis plantar, no he vuelto al cardiólogo. Me encuentro genial. A mi edad, con un marcapasos, se supone que no tienes que elevar la frecuencia cardiaca más de 50 puntos por encima de tu edad, así que nunca debería llevarla por encima de 130. Ayer me subí a una bici y llegué a 193, así que si hay algo ahí, no ha dado la cara. He llegado a 203. He estado haciendo 500 sentadillas como solía hacer. 

«Te garantizo que estaré bebiendo cada noche. No estoy bien cuando no bebo por la noche. Soy como Lawrence Taylor». 

 

 

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