En una reunión de leyendas en WWE no puede faltar Ric Flair. El dos veces miembro del Salón de la Fama estuvo el lunes en televisión acompañando a muchos de los más grandes nombres de la empresa. No tuvo mucho protagonismo en el show, pero tampoco fue necesario. Sólo con su presencia emociona a los fans y eso fue lo que pasó. Una noche que acabó con fiesta en el encordado con todos los luchadores legendarios en el mismo y las cervezas de Stone Cold en medio.
Steve Austin precisamente mencionó en el programa que la noche anterior estuvo tomando de su bebida favorita con Flair. Y la cosa no acabó con lo sucedido en el ring cuando las cámaras se apagaron pues Pro Wrestling Insider informa que este último armó una buena fiesta después.
«Ric Flair celebró una fiesta en un hotel después del show, ordenando ronda tras ronda de bebidas para los invitados de WWE en la sección para VIPs del bar. También pidió una gran cantidad de pizza. La esposa de Flair, Wendy, ex Fifi the Maid en WCW, estaba con él».
Mike Johnson, responsable de esta nota, no menciona qué otras leyendas estaban en la fiesta, pero seguramente Austin estaba por allí de nuevo con Flair pasando un buen rato. Parece que a pesar de tener 70 años, de todos los problemas de salud que ha tenido, el Hall of Famer por partida doble todavía disfruta de una buena noche de copas con sus amigos. Una muy buena noticia pues ha habido momentos en los que se temía lo peor para él. Pero no, su lado fiestero continúa muy activo.
Que grande es este señor. El más grande de todos los tiempos. El que conquistó todo. El único que se dió el gusto de paser su habilidad por todo el mundo y superó la barrera del tiempo.
Hace varios meses algunos recordarán, realice la encuesta sobre quién es el wrestler más grande de la historia, y Flair fue el más votado.
Hombre ley.
jajaj que viejito mas zangano
Me imagino que el buen Ric, hizo de las suyas…
The Stylin’, profilin’, limousine riding, jet flying, kiss-stealing, wheelin’ n’ dealin’ son of a gun!
Anciano ley, le importa poco su salud y prefiere disfrutar sus últimos años bebiendo que estando en cama. Leyenda.
Así debe ser, el día que la pelona lo reclame se van abrazados echando cuento y tomando unos tragos