Rhea Ripley fue una de las mayores ganadoras de la premiere de WWE RAW en Netflix. Recuperó el Campeonato Mundial Femenino. Se vengó de Liv Morgan. También de Raquel Rodríguez. Y de Dominik Mysterio, a quien además dio una patada en las joyas de la corona. Hasta ahí la noche ya estaba siendo una maravilla para la «Bloody» pero aún mejoró cuando estaba abandonando el escenario y entonces salió por sorpresa The Undertaker en su versión «American Badass» para festejar con ella.
► Una celebración loca
Al término del show, la nueva monarca estuvo en la conferencia de prensa y Adrian Hernandez de Unlikely quiso conocer sus sensaciones por haber compartido ese momento con el miembro del Salón de la Fama, lo cual no muchas Superestrellas, menos aún de la división femenina, han tenido la oportunidad de hacer.
«Honestamente, pensé que patear a Dom en las bolas iba a ser lo más destacado, y luego apareció Taker. Es un momento muy especial. He podido estar en el ring con personas que veía mientras crecía. Los grandes. He tenido la oportunidad de estar ahí como parte de Judgment Day y enfrentarme a personas con las que nunca pensé que estaría en el ring. Fui parte del combate de regreso de Randy Orton, del regreso de CM Punk, de la primera promo de Randy en WWE después de estar lesionado por tanto tiempo.
«Pude estar en el ring con todas estas personas increíbles. Después de ganar mi Campeonato Mundial Femenino y que apareciera el Deadman, escuchar el ‘dong’ en la vida real fue una locura absoluta. Es un momento que nunca voy a olvidar. Viéndolo mientras crecía, pensaba que era absolutamente asombroso. No puedo esperar para restregarle esto en la cara a Damian Priest.»
