El Consejo Mundial de Lucha Libre ha determinado que el mes de marzo sea de conmemoración a la memoria de su fundador, Don Salvador Lutteroth González y a una leyenda de reconocida trayectoria. El festejo se celebra muy próximo a su natalicio (21 de marzo de 1897) y desde 1996 se realiza año con año. Será el 16 de marzo cuando se efectúe la magna función de «Homenaje a Dos Leyendas 2018» en la Monumental Arena México.
Pero a esta conmemoración se unen sus dos sedes en el interior de la República Mexicana: Guadalajara y Puebla, que realizarán su propia función de «Homenaje a Dos Leyendas» distinguiendo el trabajo de grandes luchadores que se desarrollaron en estos escenarios.
Toca turno en este 2018 tributar homenaje a Carmelo Reyes «Cien Caras» en la Perla de Occidente el 27 de marzo y al Egipcio en la chula Puebla el día 19.
El primero ya fue reconocido en la Arena México en 2014, en la función «Homenaje a dos Leyendas, Salvador Lutteroth y Cien Caras”. En esa ocasión fue el octavo en ser distinguido en este tipo de función y en segundo que lo recibió en vida.
Cien Caras es oriundo de Lagos de Moreno, Jalisco. Debutó profesionalmente en 1974 bajo el nombre de Sansón (nombre que ahora usa uno de sus hijos), cambiando luego a Mil Caras y dejándolo definitivamente en Cien Caras. Se labró un nombre de manera individual, pero su proyección al estatus de súper estrella vino cuando hizo equipo con sus hermanos, Máscara Año 2000 y Universo 2000, y formaron la tercia de Los Hermanos Dinamita, siendo una de las agrupaciones más importantes de toda la historia de la lucha libre mexicana. Juntos ganaron campeonatos nacionales y mundiales, pero sobre todo fueron el azote de cualquiera que se les pusiera enfrente.
Entre sus logros hay que destacar que fue el segundo Campeón Mundial de Peso Completo del CMLL en 1991, además obtuvo el Campeonato Nacional de Peso Completo, el Mundial Semicompleto de la NWA, y Mundial Completo de la WWA y la IWC, entre otros. Sin duda siempre será recordada su férrea rivalidad con Rayo de Jalisco Jr., misma que llegó hasta sus últimas consecuencias con el duelo de máscaras que protagonizaron el 21 de septiembre de 1990. La emotiva batalla fue de tal magnitud que la afición se desbordó. Luego de dos cardíacas caídas, Cien Caras cayó ante Rayo de Jalisco Jr., y se reveló el nombre de Carmelo Reyes, el capo de capos.
Su retiro oficial de la lucha libre se dio el 18 de marzo de 2005, perdiendo la cabellera junto a su hermano Máscara Año 2000 ante el Perro Aguayo y su hijo.
Por su parte, el Egipcio, quien será homenajeado en la Arena Puebla, nació en Oaxaca, Oaxaca. Tras una ardua preparación bajo la batuta de Gorila Osorio y Rafael Salamanca, el Egipcio debutó el 21 de marzo de 1976 en Puebla. Su personaje causó sensación durante la década de los 80’s, por su equipo muy peculiar, que semejaba al de los grandes faraones egipcios de la antigüedad.
En el curso de su carrera apostó varias veces su incógnita, saliendo bien librado al quedarse con las tapas de el Doberman en febrero 1979 en la Pista Arena Revolución; o ganando la melena de Raúl Armas en ese mismo escenario en marzo de ese mismo año.
Militó en el bando del bien, hasta 1983, cuando cambió a rudo traicionando a Hombre Bala y Rayo de Jalisco Jr. Esto dio origen a una rivalidad que concluyó en un cuadrangular de máscaras al que se sumó Masacre. La batalla se llevó a cabo el 9 de Diciembre de 1983, durante la gran función de cierre de temporada de la Arena México. Masacre y Hombre Bala lograron salvarse, quedando para la definición, máscara contra máscara, el Egipcio y Rayo de Jalisco Jr.
Esta también es recordada como una batalla memorable, precedida de una rivalidad que semanas antes tuvo incluso tintes sangrientos. El hijo de Max Linares se llevó la lucha tras dos caídas muy difíciles, plagadas de violencia, pero con una contundente cruceta a los brazos rindió a su rival que cara pagó su traición. Su nombre: José Luis Hernández.
El Egipcio continuó laborando algunos años dentro de los planes estelares, siguiendo el encono con Rayo de Jalisco Jr. En abril de 1991, el Egipcio se convirtió en Campeón Nacional de Peso Completo superando al Rayo en la Arena Puebla. Tras defender el título exitosamente ante Blue Demon Jr., Mano Negra y el propio Rayo de Jalisco Jr. , éste último cobro venganza y recuperó el cetro a mediados de 1992.
