La semana pasada en Friday Night SmackDown, Roman Reigns rompió el contrato para el combate de Parejas que unificaría los campeonatos de RK-Bro y The Usos previsto para el 8 de mayo en WrestleMania Backlash. Casi de inmediato, el Jefe Tribal atacó a Riddle mientras Drew McIntyre llegaba para salvarlo. Como consecuencia, el combate se reprogramó y fue convertido a una lucha de relevos australianos, con la participación de Roman Reigns y Drew McIntyre, y sin títulos en disputa.
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► Drew McIntyre y Roman Reigns podrían atraer un mayor número de fanáticos
Vince Russo analizó en el episodio de esta semana de Legion of RAW, explicando que WWE podría tener un problema con la venta de boletos para el evento premium de este domingo. Infirió que la compañía agregó a Drew McIntyre y Roman Reigns a la lucha por equipos solo para impulsar las ventas, a pesar de que pierda el atractivo de la unificación de títulos.
«Tengo la sensación de que no se está vendiendo bien porque hubo mucha promoción para ese espectáculo durante todo este tiempo. Quiero decir, definitivamente más de lo habitual. Me pregunto si tienen algún problema con la venta de boletos. Tal vez eso sea por qué agregaron a Drew a la tarjeta también. Tal vez es por eso que simplemente agregaron a otras personas porque promocionaron al máximo, hermano».
Este cambio en el cartel ha generado reacciones divididas en el Universo WWE, algunas a favor y otras en contra. Bully Ray ve con buenos ojos este combate, bajo la premisa de que permite a los involucrados contar mejor su historia; de hecho, Drew McIntyre está perfilado como el siguiente oponente de Roman Reigns y se estarían guardando la oportunidad titular para un evento más representativo.
