Tras su regreso a Oriente Medio, los ejecutivos de la PFL han instado una vez más a la UFC a sentarse a la mesa para negociar una pelea entre Jon Jones y Francis Ngannou en un futuro próximo, en un intento por resolver finalmente el discurso que rodea a la súper pelea.
Con un evento del Campeonato Mundial de la PFL durante la noche en Arabia Saudita, la promoción hizo su regreso a la región por primera vez desde el mes pasado – donde el ex campeón indiscutible de peso pesado de la UFC, Ngannou se convirtió en una victoria por nocaut en el primer asalto sobre el contendiente brasileño, Renan Ferreira.
Y en cuanto al ya mencionado Jones, el nativo de Rochester encabezó el UFC 309 a principios de este mes en el Madison Square Garden, con una victoria en el tercer asalto sobre el ex bicampeón y enemigo común, Stipe Miocic, con un brutal nocaut tras un aluvión en la pelea de pie.
Jones, que sigue estando muy vinculado a la unificación del título con el actual titular interino, Tom Aspinall, ha sido instado una vez más a considerar una esperada pelea de rencor con el nativo de Batie, Ngannou, especialmente en un lucrativo combate en Riad.
«Lo apoyamos. Es decir, los peleadores quieren la pelea», dijo a talkSPORT el director ejecutivo de la PFL, Peter Murray. «Jon Jones quiere la pelea, Francis quiere la pelea, nosotros queremos la pelea, nuestros socios aquí en Arabia Saudí quieren la pelea. Y así, ya sabes, todo se reduce a si la UFC quiere dar el paso o no. Y punto».
Según se informa, Jones se encuentra inmerso en negociaciones para conseguir una eventual pelea de unificación de títulos con Aspinall – potencialmente tan pronto como el próximo año durante la Semana Internacional de la Lucha, pero ha afirmado que una oferta lucrativa debe venir primero de los jefes de promoción para que él considere un enfrentamiento.