En la más reciente edición de NXT, y en la séptima lucha de la noche, la estelar de la velada, se llevó a cabo una buena lucha entre dos polémicos personajes como lo son Santos Escobar y Tony D’Angelo. La familia mexicana con la mafia italoamericana.
La lucha inició con combate a ras de lona. D’Angelo sorprendió con una Desnucadora y luego Escobar la sorprendió con una Enzuigiri. Escobar buscó su movida Arrow from the Depths of Hell, pero D’Angelo lo tomó en el aire y luego le aplicó una Rompe espinas dorsal.
► Duelo de la mafia en NXT
Con patadas voladoras, el mexicano tomó la ventaja y ahora sí lo atacó con su doloroso tope Arrow from the Depths of Hell. Tras esto, Escobar conectó su Slingshot Senton en el ring. D’Angelo buscó recuperarse, pero recibió una patada voladora en la quijada.
D’Angelo luego respondió con dos Lariats y una serie de Supléxes de Estómago contra Estómago. Escobar también reaccionó con un Supléx y puñetazos a D’Angelo sobre el tope del esquinero. Escobarl uego le aplicó un Frankensteiner.
D’Angelo se recuperó y aparecieron Cruz del Toro y Joaquín Wilde para evitar que D’Angelo utilizara su barra metálica para golpear al mexicano. Los matones de D’Angelo aparecieron para luchar contra Wilde y Mendoza.
Esta distracción la aprovechó Santos Escobar para darle un derechazo en la cara a Tony D’Angelo para sacarlo de circulación y obtener la cuenta de tres segundos. Escobar escondió algo entre sus trusas, pero al repetición dejó ver que era una manopla de bronce que sacó debajo de la cubierta del ring y con la que se ayudó un poco a obtener la victoria.
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