Por Darkangelita.
La brega en la lucha femenil amateur no ha sido fácil y ha dejado a grandes exponentes fuera del sueño olímpico al no formar parte del calendario. Fue en Atenas donde todo esto quedó zanjado y las mujeres ya compiten y son parte importante de los torneos a lo largo y ancho del globo.
Una mujer que nunca pensó en competir en la lucha olímpica es la estadounidense Jackie Cataline, quien desde niña está inmersa en los tapetes de lucha al igual que cinco de sus ocho hermanos y que dejó de practicarla hace poco más de 6 años por dedicarse en cuerpo y alma a sus hijos, ahora ya con 5 y 2 años de edad, los pequeños fueron el motor para que ella regresará a las competencias. Y vaya que ese motor le dio un gran impulso, apenas hace unos días ganó el título femenil en la división máxima, los 75 kilos. Por este triunfo Jackie la clasificó para estar en el equipo de Estados Unidos en el próximo US World Team Trials a realizarse en junio en Oklahoma.
Aún falta mucho para concretar el sueño olímpico de esa mujer que como recientemente comentó a la publicación The Press-Enterprise comenzó en la lucha por seguir las andanzas de sus hermanos y después le divertía poner en su lugar a los niños que la discriminaban por ser mujer. Sin embargo el mostrarse entera, y el apoyo de su familia le valieron salir adelante:
“Mucha gente de fuera no le gustaba que yo luchara. Muchos de los niños en la escuela secundaria, sus padres no les permitían luchar contra mí porque yo era una niña. Hubo mucha controversia porque yo era una niña.»
En apoyo su papá mandó a hacer playeras que tenían la leyenda: “Mi chica venció a tu chico.”
Fue tiempo después, que en San Diego, un visor del US Wrestling puso sus ojos en ella y la seleccionó para estar entre las mejores ganando varios campeonatos de cadetes y juveniles, ella vio como la flama de Atenas abrió la oportunidad a la lucha femenil.
«Recuerdo que en 2004 me quedé despierta hasta las 2 de la mañana para ver el torneo femenil. Desperté a mis padres. Les dije: un día voy a estar en los Juegos Olímpicos.»
Con su maternidad sus prioridades cambiaron, sus hijos se convirtieron en el eje de su vida:
“Fue fácil no luchar, aunque esa chispa todavía estaba allí, justo en ese momento estaba enterrada profundamente.”
La llamaron para entrenar a un pequeño grupo de jóvenes y apenas pisó el tapete sintió que tenía que luchar de nuevo. Pero primero tuvo que bajar de peso pues después de su pequeña hija terminó pesando más de cien kilos, así que el régimen que adoptó fue intenso y bajó hasta 70 kilos, lo suficiente para competir:
“La forma en que nuestra familia siempre nos enseñaron es que si pones tu mente en algo, eso va a pasar.»
Después de la ausencia no fue fácil volver a las competencias y menos si en la final del torneo te enfrentas a una ex Campeona Mundial y cinco veces Campeona Nacional, como Iris Smith, a quien Cataline le ganó:
“Fue la primera vez que llevé a mis hijos a una competencia. Tenerlos a ellos y mis padres en la esquina fue simplemente increíble.»
Ese sueño que comenzó viendo por TV a las luchadoras en Atenas hoy está más vivo que nunca y la meta es Rio 2016. Sin lugar a dudas ella cree que podrá llegar.
Que buena esta esta señora, le haria un anal bien duro.
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