En el episodio de SmackDown de esta semana, Kevin Owens se enfrentó a Sami Zayn en una lucha en la que la expectación radicaba en la llegada de Shane McMahon. El programa atrajo a 2.542 millones de espectadores, lo cual es superior a los 2.51 millones de la semana pasada.
El tortuoso camino hacia Hell in a Cell y el continuo drama entre la familia McMahon y Kevin Owens parecen estar manteniendo a los fans sintonizados en los martes por la noche, quizá no por otra razón que para ver si Shane McMahon va a hacer algún lance suicida desde grandes alturas.
SmackDown Live fue # 4 en audiencia para la noche en la TV por cable estadounidense, quedándose atrás de Hannity, Rachel Maddow y Tucker Carlson. SmackDown Live fue el número dos en el sector de hombres de entre 18 y 49 años en la TV por cable nocturna, detrás de American Horror Story. El rating fue de .82, que supera al .74 de la semana pasada.
Hacen shows similares cada semana y no tienen realmente una competencia fuerte asi que es normal
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