La maldición de los enmascarados con los Campeonatos Mundiales

No hay muchas Superesterellas que hayan sentido la tela a lo largo de la historia de WWE en haber ganado alguna versión de un título absoluto en la compañía. Son cuatro, de hecho, y la lista no arroja datos muy alentadores. En la presente les explicaremos las razones, si se quiere la maldición de los enmascarados con los Campeonatos Mundiales en la grande del entretenimiento.

Pero antes, ¡una pequeña parada en boxes! Vamos al baúl de los recuerdos de Cuadrilátero para las 8 veces que WWE se rindió con sus Campeones Mundiales a medio camino.

¿Qué dos actuales Superestrellas top de WWE fueron probadas como el rostro de la compañía pero no convencieron a la directiva, resultando en la pérdida de sus títulos? ¿Por qué el primer reinado de CM Punk es recordado como tan desastroso, y cuánto influyó la politiquería en él? ¿Qué caso fue increíblemente similar a la primer conquista de The Fiend? ¿En qué luchador, hoy de AEW, Vince McMahon veía un gran futuro, pero lo decepcionó como monarca?

Dale play para enterarte de todas estas curiosidades y muchos otras más en nuestro último top:

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► Kane

No fue hasta junio de 1998, 35 años después de la creación del Campeonato WWE (entonces WWWF), que un luchador de estas características rompió con el molde e hizo historia como el primero en hacerse con la máxima aspiración de la lucha libre. En un combate First Blood ante el popular Stone Cold Steve Austin en el evento King of the Ring de ese año, Kane tempraneó a su adversario y logró el objetivo para sorpresa de propios y extraños, venciendo a nadie menos que el rostro mismo de la WWF.

Para entonces, «El Gran Demonio Rojo» llevaba apenas unos meses en suelo de la gigante norteamericana —con el mejor debut de todos los tiempos, a nuestra elección—y a pesar de haber caído ante su hermano The Undertaker un puñado de semanas antes en WrestleMania 14, seguía pisando fuerte como una de las estrellas más dominantes del momento. Su nombre quedó en la historia grande aquella noche, pero, honestamente, fue literalmente por esa sola noche. Y es que unas horas después en Raw is War, Kane debió defender su título recién ganado en una revancha contra su predecesor… perdiéndolo en el acto.

Esto dijo Glenn Jacobs, el hombre detrás de la máscara, al Ross Report Podcast hace unos años sobre su ¿fallido? reinado:

«La victoria de mi primer Campeonato Mundial fue de hecho eclipsada por el combate Hell in a Cell entre Taker y Mick Foley, pero cuando me preguntan cuál fue el más grande logro de mi carrera, les contesto que fue aquel, pues Austin estaba ya encaminado en su trayecto como una de los tres grandes de la historia. En mi opinión, se reduce a Austin, Hulk Hogan y The Rock.

«Lo perdí la noche siguiente en Cleveland y nunca olvidaré lo electrizante de la atmósfera. Nunca estuve frente a un público como ese. Así que sí, fue increíble ganar el Campeonato Mundial, pero fue todavía más increíble perderlo al día siguiente porque me di cuenta de que era parte de algo muy especial e impresionante, que terminó siendo el segmento más visto de Raw y desde entonces, no dejamos de subir y Austin también».

► Rey Mysterio

«¿Fallido?», preguntamos más arriba, porque realmente no fue un fracaso en sí. En tan solo unas horas, era imposible averiguar el impacto de su conquista y los números que hizo como monarca. No, la idea siempre fue que perdiera el oro la noche siguiente, tal como sucedió con Rey Mysterio en 2006.

Cuenta la historia que en aquel año, poco después del fallecimiento de Eddie Guerrero, Vince McMahon se reunió tras bambalinas con el elenco y éstos le expresaron al Presidente su deseo de que Mysterio se hiciera con el Campeonato Mundial Completo en honor a su gran amigo. McMahon, que no consideraba al de San Diego como una estrella top, se dejó llevar por la petición de los luchadores y la aceptó. Eso sí, con una condición: al igual que con «Superstar» Billy Graham a fines de los 70, le puso una fecha de tope como Campeón, independientemente de los resultados.

Así ocurrió, y el maestro del 619 reinó por 112 días. Un número para nada malo, como sí lo fue lo que transcurrió en ese período: más luchas perdidas que ganadas, y un manejo creativo que distó de ser el de un monarca. McMahon marcó territorio y dijo, «está bien, haremos esto, pero aquí mando yo y las cosas se harán así». Por ende, Rey ni siquiera tuvo la oportunidad de demostrar si podría haber valido como Campeón, a pesar de haber cargado con la correa.

Al igual que el hermano de la destrucción —que debería esperar hasta 2011 para adquirir el Campeonato Mundial Completo, por 154 días no muy fructíferos—, al menos el de ascendencia mexicana pudo volver a experimentar el sabor de la reconquista. En 2010, llegó a obtener su primer Campeonato Mundial (se le quitó el «Heavyweight» porque el enmascarado no lo era), por tan sólo 28 días. Peor sería su último «premio», el de WWE… por un par de horas para perderlo esa misma noche de Raw ante John Cena.

► Mankind

Entre Kane y Mysterio, realmente dos polos opuestos, estuvo el underdog por excelencia de la Attitude Era, Mankind. Dentro de todo, podría decirse que tan mal no le fue en comparación. No nos apresuremos, sin embargo, porque también tuvo lo suyo.

Después de la legendaria paliza ante Taker antes mencionada y una inclinación más hacia el costado cómico unos meses más adelante, la introducción de «Mr. Socko» y la traición de Mr. McMahon en Survivor Series 1998 hicieron que el universo de WWE le tomara estima y se convirtiera en un favorito de la afición. En una historia que bien podría haber sido la inspiración para Daniel Bryan mucho tiempo después, ganó legítimamente el Campeonato WWE para que la decisión fuera luego anulada por el Chairman. Pero la gloria llegaría en enero de 1999, cuando en un episodio de Raw venció a The Rock para, entonces sí, ganar el título por primera vez.

Hasta ahí fueron todas rosas, mas aunque hubo mucho contento entre el público, la satisfacción duraría únicamente 26 días. Es verdad, a fines de los 90 WWE no se caracterizaba por tener reinados muy extensos, pero esa cantidad fue aún muy pobre para la fecha. Levantaría el Campeonato nuevamente 15 días después, pero lo perdería en 20. En agosto, lo mismo, solo para que se le escapara de las manos la noche posterior en Raw.

► «The Fiend» Bray Wyatt

Y llegamos a The Fiend. El más reciente caso y el motivo de estas líneas, basándonos en su semana como Campeón Universal y la posterior derrota ante el retornante Roman Reigns. Un Reigns, que a pesar de haber sido el rostro por más de media década en WWE, increíblemente nunca tuvo un reinado mundial destacable o prolongado por un motivo u otro.

Bray Wyatt se adjudicó con el título WWE en 2017, dos años antes del arribo de su versión más demoníaca. Ya entonces fue tan sólo un puente entre John Cena y Randy Orton. Más sorprendente fue, en cambio, el resultado de su batalla contra Goldberg en Super ShowDown 2019. Ojo, que no fueron una docena de días ni un reinado repleto de desgracias, pero fue una parada inesperada que mató las esperanzas de hacer de él una bestia indominable hasta el momento cúlmine, como muchos querían ver.

Y ahora esto. De un domingo a otro, Wyatt volvió a alejarse de la corona. No es que la necesitara, porque si hay alguien que pueda ser considerado una «atracción» como lo fueron André el Gigante o The Undertaker en su día, ese es The Fiend en 2020. Ahora, nadie puede negar que él es tan sólo un ladrillo más en la maldición de los enmascarados con los Campeonatos Mundiales de WWE.

LA LUCHA SIGUE...

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