Orange Cassidy es uno de los luchadores más queridos y se podría decir que exitosos de AEW pero, ¿podría ser la cara de la compañía? Él no lo cree. El Campeón Internacional más longevo de la corta historia de la casa Élite reflexiona sobre ello en Good Karma Wrestling, donde también comenta acerca del final del episodio de Dynamite del 23 de octubre, que lo vio a él desconsolado frente al brutal ataque del Blackpool Combat Club a su amigo Chuck Taylor.
► ¿La cara de AEW?
“No, y no creo que deba ser así, ni que yo deba serlo. No quiero eso. Nunca lo quise. Quería hacer lo que tenía que hacer e irme a casa. Después de lo que pasó anoche, me quedó claro que no tengo elección en la situación. Al principio, en AEW, siempre existía esa idea de ‘Oh, él intentará. Esta vez le importará.’ Pero ahora no siento que tenga opción. Tengo que luchar. No quiero, pero si las personas que más me importan están en peligro, entonces realmente no tengo elección«.
► El final de Dynamite
«En ese momento exacto, llegué literalmente un segundo tarde. Me deslicé en el ring justo cuando Claudio aplastaba la silla contra su cuello. Obviamente, no soy muy calculador, solo reacciono. Todo el día estuve reaccionando. Chuck me dijo cosas que necesitaba escuchar, cosas que un buen amigo diría. Estoy reaccionando. Nunca pensé que volvería a verlo tendido. Trent lo lesionó antes, y ver eso de nuevo fue algo que nunca pensé que tendría que presenciar. En ese momento, no quiero decir que me desconecté, pero todo lo que estaba pasando no era algo que esperaba. Mis pensamientos quedarán claros en Dynamite. Fright Night.”
¿Qué opinas del presente de Orange Cassidy en AEW?