Cuando se supo que Kayla Harrison no lucharía por el título del peso gallo de la UFC la próxima vez, su objetivo quedó muy claro.
En el UFC 307, luchará contra Ketlen Vieira la misma noche que Raquel Pennington defienda el título contra Julianna Peña.
Si Harrison es capaz de salir ahí fuera y ofrecer una actuación dominante como la que ofreció en su debut en el octágono en el UFC 300, no se podrá negar que será la próxima rival de la ganadora del evento coestelar.
La antigua estrella de la PFL está ansiosa por empezar, y su sueño de convertirse en campeona de la UFC parece estar ahora a su alcance. Hay un problema potencial con su plan y que implica escuchar «y la nueva» (Campeón es…) el 5 de octubre, en Salt Lake City.
► Kayla Harrison dice que si Juliana Peña se toma un tiempo como campeona sería frustrante para ella
Harrison ha dejado bastante claro que aunque el cinturón es su principal objetivo, vencer a Peña por él sería un incentivo añadido tras sus comentarios de ida y vuelta en los últimos tiempos.
En una reciente entrevista con Kevin Iole, se mencionó que si Peña recupera el título de peso gallo, podría pasar algún tiempo antes de que la veamos defenderlo. La «zorra venezolana» lleva más de dos años sin pelear y, para empezar, nunca ha sido la luchadora más activa de la lista.
Harrison dijo que aunque no quiere malgastar su energía pensando en un problema que está fuera de sus manos, sería muy frustrante para ella si tiene que esperar a que Peña defienda el cinturón.
«Trato de no [pensar en las largas pausas] porque controlas lo que puedes controlar y confías en la UFC, confías en que tienen un plan pero sí, eso me jodería mucho. Quiero mantenerme activa, así que espero que… todo vaya bien, no puedo controlarlo. Está fuera de mis manos, pero sí».