Jacobs se pasó del peso; Canelo está enojado con él

Jacobs se pasó del peso estipulado en la famosísima cláusula de rehidratación para la pelea con Canelo.

Pero eso es algo que ya se veía venir, porque el propio equipo de Jacobs dijo que, si era necesario pagar la multa por pasarse de las 17 libras, lo harían. Esto para evitar que el estadounidense llegue mermado al combate.

Acá también juegan, o jugaban, las reglas de los organismos, más precisamente las de la Federación Internacional de Boxeo.

Normalmente, la FIB no permite que los boxeadores que disputan sus campeonatos suban arriba de 10 libras de la división en la que militan. Esto para que ninguno lleve demasiada ventaja sobre el otro por el peso.

Así que, no era algo ni descabellado, ni abusivo ni nada a lo que al menos Jacobs no estuviera acostumbrado.

Sin embargo, al ser una pelea de corte unificatorio, ya que Canelo es campeón mediano por la AMB y el CMB y Jacobs de la FIB, la cláusula del límite por reglamento queda anulada.

Así que, sin la regla de la FIB y con el evidente desdén de las reglas del contrato por parte del equipo de Jacobs, el estadounidense subió al segundo pesaje con 173 libras.

Canelo llegó en 169, dentro de lo pactado.

Obvio es algo que no quedó en secreto y de inmediato del lado de Canelo se hicieron escuchar.

A Jacobs le va a tocar pagar multa, pero no le importa mucho

«Jacobs se pasó del peso. Es lo que es. Hablé con Canelo y su respuesta fue: está bien, no me importa, igual lo lastimaré. Canelo está enojado y va a lastimarlo», dijo Oscar de la Hoya.

Ya a pocos momentos del combate, puede parecer que eso no es tan importante ya, porque todos sabíamos que habría demasiado drama, de por sí que la elección de rival a fue polémica desde el inicio.

Ahora sólo falta esperar al campanazo inicial para ver los efectos del peso.

LA LUCHA SIGUE...
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