No serán tal vez los mejores segmentos a nivel creativo, pero nadie puede negar que dan de qué hablar. WWE intenta acaparar miradas también a posteriori de cada episodio semanal a través de visualizaciones en YouTube, y cada vídeo que se ha publicado con Lana, Rusev y Bobby Lashley ha obtenido buenos números en este sentido. Así, cuando el lunes durante el cierre de Raw la historia dio un giro a causa de Liv Morgan, quien confesó haber mantenido una relación amorosa con «The Ravishing Russian», evidentemente hubo traca. Aunque Joey Ryan tiene una opinión poco favorable acerca del segmento, más allá de la calidad del mismo.
https://twitter.com/JoeyRyanOnline/status/1211880061168537600?s=20
Esto es muy malo. Y no es culpa del talento, la culpa recae en los guionistas. Usar lo gay como recurso sorpresa perpetúa la idea de que es algo inusual o raro, lo que hace que los estereotipos sigan vivos. No hay duda de que WWE intenta buscar una audiencia milenial.
► Liv Morgan y su factor sorpresa al servicio de la historia
Tal vez Ryan se encuentre resentido con McMahonlandia por no recibir el pasado año una oferta a la altura de sus expectativas, o simplemente quiera seguir alimentando ese cliché anti-WWE que cada luchador independiente que se precie debe destilar en redes sociales. Porque desde luego, su crítica luce completamente gratuita.
El colectivo gay debería estar representado en las historias luchísticas, claro. Pero aquí, la lógica de los hechos dictó sentencia. Después de que un hombre y una mujer declararan ser antiguos cónyuges de Lana y Lashley, respectivamente, tuvo lugar el retorno de Liv Morgan. Y si hay que culpar a alguien de que la revelación de Morgan causara sorpresa, al no ir dirigida a Lashley, sino a Lana, culpémonos a nosotros mismos.
Porque estoy seguro de que el propio Ryan tampoco esperaba ese giro de los acontecimientos. Por desgracia, aún la deducción más lógica instalada culturalmente en nuestras mentes nos lleva a pensar en una historia heterosexual, antes que en una homosexual, sobre todo bajo un producto conservador y «mainstream» como WWE.
Moose, compañero de Ryan en IMPACT! Wrestling, también comentó al respecto, aunque quitando hierro al asunto con bastante más sentido común.
https://twitter.com/TheMooseNation/status/1212003536558546944?s=20
Creo que esto se adscribe a la misma categoría que la lucha intergénero como entretenimiento. Es lucha libre. Por otra parte, la homosexualidad es normal. Deberíamos incluirla más en las historias luchísticas, pues no todas las historias de amor son heterosexuales.
https://twitter.com/TheMooseNation/status/1212018365247692800?s=20
No importa cómo lo hagas o presentes… tendría el mismo factor sorpresa porque no se ha hecho en televisión de lucha libre. Creo que la gente debería intentar disfrutar de la lucha libre por lo que es en sí, y no intentar buscar algo malo
Pues la verdad pésimo. Si lo que querían era introducir un personaje gay para la inclusión siento que hubieran habido otras formas. Demasiado incómoda toda la trama de rusev y lana para al final caer en esto.
Bien dicho Moose.
Esque eso no ha sido lucha libre, ha sido una especie de obra de teatro mala malisima, y contra mas la alargan peor huele
Hasta para hacer este tipo de historias se requiere el talento para hacerlo! algo que ni Liv ni Lana tienen!
No se quien pierde mas con esta tonteria rusev, lashley, liv o sinplemente todos
Pues la verdad pésimo. Si lo que querían era introducir un personaje gay para la inclusión siento que hubieran habido otras formas. Demasiado incómoda toda la trama de rusev y lana para al final caer en esto.
Bien dicho Moose.
Esque eso no ha sido lucha libre, ha sido una especie de obra de teatro mala malisima, y contra mas la alargan peor huele
Hasta para hacer este tipo de historias se requiere el talento para hacerlo! algo que ni Liv ni Lana tienen!
Vince lo volvió a hacer. La gente está hablando mucho gracias a una porquería.
No se quien pierde mas con esta tonteria rusev, lashley, liv o sinplemente todos
Vince lo volvió a hacer. La gente está hablando mucho gracias a una porquería.