TNA se encuentra en una encrucijada que genera gran incertidumbre sobre su futuro. En los últimos años, su relación con WWE ha mejorado notablemente, hasta el punto de que ambas empresas han firmado un acuerdo de colaboración oficial. Sin embargo, este acuerdo es visto como controversial por muchos fans, ya que refuerza la idea de que TNA podría estar perdiendo autonomía y relevancia en el panorama de la lucha libre profesional.
Si bien esta alianza ha permitido que TNA reciba una mayor atención del público masivo, la relación entre ambas empresas no es equitativa. Hasta ahora, TNA ha enviado a algunos de sus mejores talentos a WWE, donde han sido utilizados en NXT, mientras que WWE ha respondido enviando a luchadores en desarrollo a TNA. Esto recuerda la breve colaboración que TNA tuvo con AEW hace unos años, pero con una diferencia clave: en aquella ocasión, TNA recibió a una superestrella del calibre de Kenny Omega, quien incluso tuvo un reinado como Campeón Mundial. Durante ese período, la empresa experimentó un notable crecimiento en ratings televisivos, visualizaciones en Twitch y ventas de PPV. En contraste, tras casi un año de relación con WWE, no se ha registrado una mejora significativa en los números de TNA.
►¿WWE absorberá a TNA?
Ante este panorama, muchos especulan que el destino de TNA podría ser su eventual adquisición por WWE, tal como sucedió con Evolve hace unos años. Si esto llegara a concretarse, WWE sumaría la vasta biblioteca de contenido de TNA a su catálogo, fortaleciendo aún más su dominio en la industria. Sin embargo, esta posible absorción también tendría un impacto negativo en la escena independiente de la lucha libre en Norteamérica. La pérdida de Ring of Honor tras su compra por AEW ya redujo las opciones para los luchadores independientes, y la eventual desaparición de TNA como una entidad independiente limitaría aún más las oportunidades laborales para los talentos emergentes.
Además, TNA enfrenta otro desafío: la estrategia de contratación de talentos. En el pasado, la empresa se destacó por apostar por jóvenes promesas del circuito independiente, ayudando a desarrollar nuevas estrellas. Sin embargo, recientemente ha vuelto a priorizar la contratación de ex-luchadores de WWE, lo que podría afectar su identidad y capacidad de crecimiento a largo plazo. Esta situación plantea una pregunta clave: ¿podrá TNA encontrar un equilibrio entre su asociación con WWE y la preservación de su independencia, o está condenada a convertirse en otra filial más de WWE.
El futuro de TNA sigue siendo incierto, pero una cosa es segura: las decisiones que tome en los próximos meses definirán su destino.