El deporte se debe concebir como una competencia en donde dos personas o equipos, en igualdad de condiciones, deberán demostrar en base a sus habilidades, quien posee una mayor capacidad.
Esto significa, que en una competencia deportiva, el tener una ventaja sobre el rival, va en contra de la esencia misma del deporte y en contra de la sana y justa competencia.
El dopaje, es decir, el consumo de sustancias que contribuyen a que quien las utiliza tenga una ventaja física sobre su rival, es quizás la forma mas deshonesta para conseguir un triunfo, pues no solo es hacer trampa, sino que también es poner en riesgo la salud y la integridad de quien las consume, algo que va totalmente en sentido contrario a lo que el deporte en si mismo debe representar.
Un atleta se forja a base de entrenamiento, de una dieta, de una disciplina, de un esfuerzo constante cuyos resultados se deben ver reflejados en la competencia, habrá quienes la naturaleza les dio más que a los otros y que es utilizado para sobresalir de los demás, quienes no cuenten con ello, son los que deben esforzarse más para poder estar al mismo nivel.
Sin embargo, hay personas que han dejado eso a un lado y se han dejado corromper con el consumo de sustancias prohibidas y con ello han ganado no solo competencias, sino un lugar en la historia, la idolatría de millones de personas que los ven como un ejemplo a seguir, niños que aspiran a ser como ellos… Hasta que nos damos cuenta que lo que consiguieron no vale nada por haber hecho trampa.
Jon Jones
En todos los deportes profesionales, queda claro que el que salga con la victoria es quien tiene los reflectores, por lo tanto es quien va a obtener mayores recursos en base a sus resultados dentro de su disciplina, los patrocinadores están interesados en los ganadores, no en los segundos lugares.
Y es por eso, que esa necesidad de ser siempre los mejores, en base al estímulo económico ha contribuido a que el dopaje se haga presente, el caso más reciente, el de Jon Jones en la UFC, quien regresaba de una suspensión para nuevamente dar positivo.
Las consecuencias van desde el cambio en el resultado de su última pelea con Cormier, y que se desvanezca la posibilidad a corto plazo de verlo en el octágono enfrentando a otro que también ha sido sancionado por el uso de sustancias prohibidas como lo es Brock Lesnar.
Otros casos
Y es que no son pocos los casos dentro de la UFC donde el uso de sustancias prohibidas, nombres como Mirco Cro Cop, Yoel Romero, Lyoto Machida, BJ Penn, Adam Hunter (este con 5 sustancias prohibidas encontradas en su cuerpo al hacerle el examen correspondiente) y muchos más, se suman a esta lamentable situación, y aunque para mucha gente esto no sea muy importante, otros consideran que sin honor no hay victoria que festejar, y la trampa no tiene ningún honor sin duda.
El deporte profesional recuerda el caso de Ben Johnson cuando venció a Carl Lewis en las olimpiadas de Seul 88, el rostro del canadiense al final de la prueba lo mostraba como alguien orgulloso de su victoria, feliz por el resultado, pero cuando dicho triunfo se desconoció por el uso de sustancias prohibidas, esa felicidad se volvió una de las mayores vergüenzas deportivas.
Ni qué decir de Lance Armstrong, el hombre que lo había ganado todo, el mejor ciclista de la historia, el ídolo de millones de aficionados a ese deporte, el referente mismo de cualquier competencia de este tipo, que al final, tuvo que reconocer que usó sustancias prohibidas desde inicio de los años 90’s, sus triunfos y la alegría que le dio a la gente que lo apoyaba fueron borrados y Armstrong cayó de lo más alto hasta el piso mismo, tal como sucedió con Marco Pantani que incluso, terminó suicidándose.
Marion Jones, Mark McGwire, Sammy Sosa, Salvador Carmona, Justin Gatlin, Alex Rodriguez, Diego Armando Maradona, y muchos otros deportistas, vieron como su carrera se empañó bajo el doping, o peor aún, su carrera se acabó y sus logros y hazañas siempre estarán bajo la sombra de la trampa y de la falta de honor dentro de su carrera.
Es de humano cometer errores, pero cuando ese error se comete más de una vez y con la conciencia misma de los alcances de dicho acto, ya no puede ser disculpado, no si se pretende honrar un deporte y darle el lugar que merece a la gente que se ha esforzado para llegar a lo mas alto sin la necesidad de haces trampa, los atletas son un ejemplo, aprendamos de ellos lo bueno, ganar es importante, pero hacerlo con honor es sin duda, una mayor satisfacción.
Un tema fascinante como continuación de éste, sería uno que hable de los efectos que tienen en el cuerpo estás drogas, y de qué ventajas confieren a quien usa estos estupefacientes.
Un tema fascinante como continuación de éste, sería uno que hable de los efectos que tienen en el cuerpo estás drogas, y de qué ventajas confieren a quien usa estos estupefacientes.