Todo lo que hemos ido sabiendo de la rehabilitación de Jon Moxley ha sido positivo; las últimas declaraciones de Tony Khan al respecto apuntaban en este mismo sentido. Y más recientemente veíamos al luchador lucir fenomenal. Ahora nos hacemos eco de las palabras que Eddie Kingston le dedicó a su compañero antes de que comenzara el tratamiento. El luchador de AEW las daba a conocer mientras hablaba en NY News 12 Long Island, contando además los momentos en que él mismo tocó fondo.
► Las palabras de Eddie Kingston a Jon Moxley
«Le dije a Moxley antes de que se fuera e hiciera lo que tenía que hacer, le dije: ‘hombre, nada de esto importa. Lo único que importa es tu esposa y tu hijo. Tienes que hacer esto por ellos, y yo te apoyo de todos modos. Ya sea que vayas o no, aquí estoy’. Y él estaba como: ‘está bien, hombre’. Responde con una sola palabra a todo el mundo. Para alguien como ‘MOX’, debes poder leer entre líneas. Entonces, cuando dice: ‘hombre, está bien, tienes razón’, no es solo eso.
«Son las otras cosas que te está diciendo. Pero estoy orgulloso de él, y les está mostrando a todos: ‘mira hombre, todos somos imperfectos’. Los hombres pueden tener defectos, se nos permite tenerlos. Pero lo que no se nos permite es tener defectos y no cambiar, no tratar de trabajar para lograrlo. Eso no está bien. Entonces, estoy orgulloso de él. Está tomando los pasos correctos y saludables«.
► Cuando Eddie Kingston tocó fondo
«Ha habido un par de momentos en los que toqué fondo mentalmente. Pero hubo uno que estaba mental, física y emocionalmente por el suelo. Acababa de salir de una relación muy mala, tóxica, emocional y físicamente agotadora. Y volví y traté de enmascarar mis sentimientos bebiendo mucho. Comía mucho, y me metí en problemas. Me peleé un poco. A mi edad, yo estaba como: ‘¿por qué estoy peleando?’. Pero estaba en una celda arrestado y miré la celda y vi un graffiti que vi cuando tenía dieciocho años. Y dije: ‘Estoy de vuelta aquí’. Fue como: ‘no. Algo tiene que cambiar. O salgo de la lucha libre o algo así, pero algo tiene que cambiar. Ya no puedo hacer esto’. Así que definitivamente fue lo más bajo de lo bajo.
“Yo diría que fue hace unos años, quizás cerca de cinco. Fue simplemente un mal momento. Honestamente, para decirte, no sé cómo salí de eso. Solo sé que tuve a mis padres a mi lado. Nunca hubo ningún juicio por parte de ellos, simplemente decían: ‘sí, bueno, así es la vida. Hay que aguantar. Te ayudaremos, pero seguirá siendo difícil’. Los pocos amigos que tengo, porque tengo un círculo muy pequeño, muy pequeño, los pocos amigos que tengo, los que se quedaron conmigo fueron como: ‘Estamos contigo. Vamos.’ He tenido suerte y he sido bendecido por eso. He tenido gente que se ha vuelto contra mí y he tenido personas que pensé que eran buenas personas que resultaron no serlo, pero he tenido la suerte de tener al menos un amigo, mi hombre Homicide. Un tipo fuerte que ha estado ahí desde el principio y no irá a ninguna parte. Puedes creerme, intenté alejarlo y se rió de mí».
