Dustin Poirier parece haber decidido su futuro como peleador. “The Diamond” es un peleador profesional desde 2009 y sabe que sus últimos días están por llegar.
Poirier (30-9 MMA, 22-8 UFC) viene de lo que creía que sería su última oportunidad de reclamar el título indiscutible de peso ligero de UFC en UFC 302.
Después de perder ante Islam Makhachev, Poirier dijo que se tomaría un tiempo con su familia para evaluar si pelearía nuevamente o se retiraría.
A principios de agosto, Poirier le dijo a MMA Junkie que se tomaría 30 días para decidir su próximo paso. El viernes, Poirier publicó en las redes sociales que regresará para una pelea más, citando a Liam Neeson en “The Grey”.
“Lo haré. Una vez más en la contienda, en la última buena pelea que conoceré. Vivir y morir en este día, vivir y morir en este día”.
Antes y después de sus combates más recientes, Poirier, de 35 años, ha declarado que debe tener una buena razón para seguir peleando. Su última aparición fue clara, con el oro de UFC en juego. Era un objetivo importante, ya que consiguió el oro interino en 2019 al derrotar a Max Holloway en UFC 236, pero no pudo alcanzar el estatus de campeón indiscutido.
Poirier ha intercambiado victorias y derrotas en sus últimas cinco peleas, todas contra la élite de la división de peso ligero de la UFC. Su última racha de victorias consecutivas llegó en 2020-21, cuando derrotó a Dan Hooker y Conor McGregor en su segundo y tercer enfrentamiento.