Cung Le puso fin a su carrera saliendo por la puerta trasera de las MMA, a dar positivo por niveles elevados de la hormona de crecimiento humano en una prueba de drogas supervisada por el UFC después de su pelea contra Michael Bisping el 23 de agosto de 2014 en Macao. Sin embargo, él piensa que la culpa recae enteramente en el presidente de UFC Dana White y en el CEO Lorenzo Fertitta
Hablando con Nate Quarry en su podcast de «Round X Round», el peleador dijo que UFC lo obligó varias veces en situaciones en las que tuvo que pelear lesionado y mencionó una prueba de drogas que en realidad no fallo.
Dos semanas después de que Dan Henderson peleó con Lyoto Machida. Yo estaba en Los Ángeles y me dijo que me reuniera con ellos después de la pelea. Yo les dije que el médico todavía no me había dado el visto bueno. No tienes el visto bueno, necesitas dar un paso por la compañía. Yo les dije que no podía conseguir que el médico que me diera el aviso. No creo que pueden hacer eso. Les dije ojalá yo estuviera listo en una semana. Dana dijo: ‘Está bien. Tienes que dejarme saber de inmediato. Esa noche estoy conduciendo y mi teléfono explota. Dana había anunciado mi pelea con Rich Franklin en Macao
Cuando Le regresó al Octágono en Macao contra Bisping, tras dos años de ausencia, y sucedió lo del doping por hormona del crecimiento humano, afirma que UFC lo presionó para que admitiera la culpa por el uso de los PED. Esto fue a pesar del hecho de que el Dr. Don Catlin, experto en drogas para mejorar el rendimiento, dijo que los niveles de HGH deCung Le fueron inferiores a los valores de referencia post-ejercicio esperado para un atleta que entrega una muestra después de una actividad extenuante.
Dana me llama y me dice que si lo reconozco, va a ser más fácil. El público me perdonaría más. ‘Mira el pitcher de los New York Giants, que fue arrestado por algo.’ Dana estaba diciendo que es más fácil sólo admitirlo. Yo simplemente no quiero hablar con él nunca más. Tuve que colgar. Bien podría simplemente haber enviado algunos matones a mi casa para que fueran mano dura conmigo o algo así. Es simplemente ridículo.