Si hay una palabra que no define a Bethe Correia es la mesura. No conforme con hacer chistes sobre Ronda Rousey y el suicidio, amenazarla con romperle la quijada y decir que la humillaría y la mandaría a casa sin cinturón, luego de haber perdido en 34 segundos contra la campeona de peso gallo UFC, no planea terminar su discurso.
Correia considera que había conectado bien a la campeona y que Rousey tuvo suerte al conectarla de manera tan letal que la derrotó antes de un minuto. También comenta que se merece la revancha, que es inevitable que se encuentren otra vez y que en esa ocasión, será ella quien salga vencedora.
«Te lo advierto Ronda, pelearé por conseguir una revancha en 2016, seré más fuerte más madura… Nos volveremos a ver» escribió Bethe en Twitter. «Quiero pelear contigo y obtendré la pelea. Me ganaré de nuevo esa oportunidad y obtendré mi revancha a su debido tiempo».
Correia también aprovechó para quejarse del trato que recibió de los medios, al ser señalada por hacer apología al suicidio cuando el padre de Ronda lo cometió sin que nadie notara que Ronda también la ofendió en su juego de palabras.
-Fui muy criticada y juzgada por la malinterpretación de mis palabras sobre la actual campeona. Toda la promoción me la pasé viendo su cara jugándola de santa, cuando públicamente dijo que me llevaría a mi «encuentro con Jesús» (…) nunca pelearía con alguien con la intención de matar o romperle el cuello, que es una situación de la que no hay regreso. No bromearía con eso porque desear matar a alguien es no preocuparse por el dolor que la familia podría sufrir.- mencionó Bethe.
A decir verdad, Bethe está en todo su derecho de pedir lo que cree que merece, la cosa está en que sea capaz de lograr ganarse a cabalidad una vez más la oportunidad de enfrentar a Ronda Rousey. Así que habrán de pasar alrededor de dos o tres peleas para ver si se logra colocar nuevamente en la línea de las retadoras.