Como trasfondo de la rivalidad que mantienen hoy Orange Cassidy y Trent Beretta, Chuck Taylor supone el tercer protagonista en discordia, luego de que saliera lesionado de aquel «Parking Lot Brawl» del pasado 27 de abril por obra y gracia del rudo, quien le endosó un golpe en un tobillo con una llave inglesa.
Días después, durante Dynamite, Cassidy comentó sobre el ring que Taylor no volvería a competir debido a la lesión contraída, y ahora sabemos que esto fue una manera de justificar un retiro legítimo. Vía Wrestling Observer Newsletter, Dave Meltzer escribe lo siguiente.
En televisión hablaron de que la carrera de Chuck Taylor quizás estaba acabada. En la historia dicen que está terminada, pero también dejaron una puerta abierta. Por lo que nos han contado, lo que se dijo en televisión fue cierto y se cree ahora mismo que Taylor no podrá volver a luchar otra vez. Excalibur dijo en el show que debido a la naturaleza de la fractura y la presencia de necrosis en el hueso (osteonecrosis) en fragmentos bajo el cartílago, la lesión es seguramente de las que terminan carreras. Claro que, a Sting, Bryan Danielson, Katsuyori Shibata, Adam Copeland y Christian Cage les dijeron lo mismo y todos volvieron y lo hicieron genial, así que siempre pienso que no hay nada definitivo. Dijeron que incluso con cirugía, tal vez no pueda volver a luchar. La carrera de Billy Graham terminó por los mismos problemas de osteonecrosis en su tobillo y cadera.
► El nuevo rol de Chuck Taylor
Pero afortunadamente, la lucha libre ofrece más vías aparte de la competición. Según informa Fightful, Taylor ha estado preparándose como entrenador y productor, y en caso de que por desgracia se confirme su incapacidad para volver a luchar, AEW seguramente le ofrecería un puesto tras bambalinas.
Taylor nunca ha portado un título bajo los focos de la casa Élite, a la que llegó en su momento fundacional, hace un lustro. Pero Taylor posee un amplio historial en la escena alternativa, siendo, por ejemplo, Campeón Mundial PWG o Campeón Ironman Heavymetalweight. Un bagaje que lo valida sobradamente para ser casi cualquier cosa más allá de la competición.
