Si bien salió de WWE casi que por la puerta trasera porque su despido fue totalmente sorprendente y sin que tuviera la oportunidad de demostrar su talento en SmackDown, Chelsea Green continúa ligada con WWE. Al menos durante un par de días más.
Y es que la luchadora tomó la opción de arrendar uno de los 7 rings del Performance Center de cara a su regreso a la lucha libre, que probablemente será en Impact Wrestling, pero mientas entrenaba con Santana Garrett, otra recientemente despedida de la empresa, sufrió una lamentable lesión. Y eso la mantendrá unida a WWE un poco más, según reveló en su podcast Green With Envy:
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«El sábado decidí subir al ring por primera vez desde que me dieron el alta médica. Llamé a Santana Garrett para que pudiéramos tener una pequeña sesión de chismes y rodar por el ring. Por lo general, solo reservo el ring durante aproximadamente 2 horas.
«Pero Santana y yo nos pasamos el 90 por ciento del tiempo que estuvimos en el Performance Center hablando. Cuando me di cuenta de la hora que era, solamente nos quedaban como 20 minutos antes de que tuviéramos que salir del ring y darle paso a las otras personas que lo hubieran alquilado.
«Así que decidí que sería bueno hacer algunas volteretas, proyecciones de hombro y cosas así antes de irnos. Hice un par de rollos muy normales, los que cualquier luchador aprende el primer día de entrenamiento. Fui a hacer uno de estos rollos, algo muy normal dentro de la lucha libre profesional, y ‘Pop’. Escuché un desagradable sonido de ‘Pop’, ¿y adivinen de dónde vino? Sorpresa, sorpresa… ¡De mi brazo izquierdo! Justo alrededor del área que se rompió el año pasado.
«Fue un sentimiento tan asqueroso. Me dolió mucho. Diría que duele casi tanto como rompérselo. Realmente pensé en ese momento que estaba roto o fracturado. Me fui a casa y me tomé un Advil, le puse hielo para ver si el dolor desaparecía pero estaba muy equivocada. A la mañana siguiente me desperté y tuve que ir directamente a Urgencias. El dolor fue tan intenso, mi brazo estaba muy hinchado y, obviamente, estaba un poco asustada. Pero no, no estaba roto.
«Para todos esos hijos de perra que dicen que soy propensa a las lesiones: No lo soy. Me tomaron radiografías y definitivamente no está roto. Ni fracturado. Estoy muy agradecida por ello. Al parecer, por la gran cantidad de tejido cicatricial acumulado eso está molestando o irritando el tendón.
«En fin… Me puse en contacto con WWE y tuvieron la amabilidad de dejarme entrar al Performance Center y empezar a rehabilitar mi brazo con su fisioterapeuta. Gracias a Dios. Estoy muy agradecida de que esa lesión ocurriera en un ring de WWE. Aún estando ya despedida, WWE se ocupará de esa lesión, gracias a Dios.
«Si no eres estadounidense, pero vives en los Estados Unidos, conoces mi lucha. El sistema de salud es salvaje. Fue mi desalentador cuando vi los precios de la cirugía. Y solamente el precio de ir a la sala de urgencias. Estaré en el Performance Center durante las próximas dos semanas, lo cual es un poco divertido y algo incómodo.
«Tuve un poco de ansiedad conduciendo hasta el Performance Center, pero vale la pena para ocuparme de esta mie*** que me tocó. Muchos del staff del Performance Center siguen siendo mis amigos, así que si bien es incómodo, necesito que se ocupen de esta mie***. Me duele, pero me estoy recuperando. Seguiré sanando. Así puedo prepararme para mi debut en la lucha libre profesional el 14 de julio«.