Pues Canelo se toma muy en serio la «época de dar».
Tan así, que su antojo de tacos se convirtió en una acción que benefició a otras personas.
Pues sucede que Canelo llegó a un puesto de tacos a pie de calle, pidió su orden y causó emoción entre los comensales, tal vez porque la última persona que esperaban encontrar en los tacos, era al boxeador.
Entonces, como si la sorpresa no fuera suficiente, Canelo comió sus alimentos, pagó su cuenta y la del resto de las personas que comían ahí.
Además se tomó foto con algunos fans.
Así que pónganse listos cuando vayan a los tacos, no vaya a ser que Canelo ande por ahí y se lo pierdan.