CAMPAL: La triste regla de tres muertes seguidas en la lucha libre

No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.
(Miguel Hernández)

Aunque no hay una base científica para afirmar que una especie de efecto dominó sucede tras la muerte de una celebridad, y que dos más están por suceder, hay muchos casos a lo largo de la historia que hacen que uno dude porque no hemos encontrado aún la estructura de esa ley.

Es normal que en la lucha libre suceda esto, aunque hay unas temporadas, como está de confinamiento, que hacen que las ausencias duelan más, dejen más sinsabor en la boca. Los primeros días de mayo nos quedamos sin algunas figuras de la talla de El Mercenario o del extranjero Supreme, pero la segunda quincena empezó aún peor.

►La triste regla de tres muertes seguidas en la lucha libre

  • Discovery (el maestro)

La triste regla de tres muertes seguidas en la lucha libre
Discovery y la regla de tres muertes seguidas en la lucha

Apenas fue el 15 de mayo pasado, cuando se supo la triste e irreparable pérdida del gladiador Discovery. Éste gladiador que vivió su mejor época en la segunda mitad de los noventas en la Caravana Estelar, donde junto a Venom, Ludxor, Súper Nova (Mike Segura), Frisbee y Boomerang formó la versión de Peña de los Cadetes del Espacio.

Pero tiempo antes ya había integrado los Power Raiders, siendo él el Azul, junto a Skayde (Power Raider Blanco), Lasser (Power Raider Rojo) y Venum (Power Raider Verde) enntre 1994 y parte de 1995.

Antes de esa etapa, ya había llamado la atención en las luchas preliminares de El Toreo de Cuatro Caminos, cuando éste inmueble vivía sus últimas funciones como la casa de los independientes. Bajo el nombre de Gamma, fue común verlo junto a nombres como Takeda, El Sagrado, El Oriental y El Seminarista, enfrentado a gente como Los Machos, Loco Valentino, Príncipe Maya, Perro Silva o Cassandro.

Gamma ya había probado suerte antes en el norte del país. De donde lo recomendaron para Lucha Libre Internacional.

Ya en éste siglo, Discovery migró con rumbo a Chicago, donde se pudo establecer y volver a los cuadriláteros en empresas como GALLI, ELLMEX y LLT. Pero a partir de ahí comenzaría otra labor, tan o más digna, que es la de enseñar a las nuevas generaciones. Su estilo aéreo cayó de manera idónea en Chicago ante una generación de jóvenes hambrientos de conocimientos y glorias.

Bajo su batuta se formaron Samuray del Sol (hoy Kalisto en WWE), Michael Paris (Zema Ion o DJ Z en Impact y Joaquin Wilde en WWE), Storm Grayson, Golden Dragon, Chico Suave, y muchos otros durante los últimos diez años.

Descanse en paz. Su legado seguramente continuará por muchos años más.

  • Sangre Fría (la leyenda)

Sangre Fría y la regla de tres muertes seguidas en la lucha
Sangre Fría y la regla de tres muertes seguidas en la lucha

Nacido como Roman Zacarías, éste gladiador comenzó a luchar a finales de la década de los cincuentas del siglo pasado bajo el nombre de Bello Román. Durante la década de los sesentas usó el nombre de Yanga, con el cual consiguió posicionarse como un rudo importante en las arenas chicas del circuito capitalino. Ahí lo conoció el periodista y visionario Valente Pérez, y como en otros casos le cedió uno de sus personajes, el cual fue lanzado como un suceso en la revista Lucha Libre: Sangre Fría.

El lanzamiento del nuevo rudo ocurrió por la puerta grande, y se mantuvo en los turnos estelares durante buena parte de los sesentas y setentas, teniendo giras alrededor del mundo.

En medio del rompimiento coyuntural que tuvo la lucha libre en ese entonces, cuando Rene Guajardo, Ray Mendoza y muchos luchadores más optaron por salir de la Empresa Mexicana de Lucha Libre, don Salvador Flores comenzó a formar lo que sería Lucha Libre Internacional, con el apoyo de Valente Pérez, y muchos de sus luchadores.

Una de las formas más sencillas que idearon para generar adeptos a la nueva empresa fue armar las famosas Ruletas de la Muerte, donde muchos luchadores exponían sus incógnitas. Una de las primeras se organizó en la Plaza de Toros México, el 11 de octubre de 1975, y en ella estuvieron involucradas muchas de las estrellas de esa época: Canek, Rayo de Jalisco, Tinieblas, Mil Máscaras, Dr. Wagner y varios más.

Esa noche, con un formato extraño, pues los ganadores avanzaban hasta llegar a la estelar para jugarse las máscaras, y el equipo triunfador se hacía no sólo de las máscaras, sino de una bolsa en efectivo, llegaron a la final As Charro y Gallo Tapado contra Chicano Power y Sangre Fría, cuatro de las máximas creaciones de Pérez frente a frente. Al final, tanto el Gallo como Charro se impusieron y mostraron al mundo los rostros de Juán José Avila y Román Zacarías.

Unos meses después, y tras ser abandonado el personaje de Hermano Muerte I, el Hermano Muerte II anduvo buscando un nuevo compañero. Valente Pérez otra vez optó por Zacarías para este equipo, y los volvió a lanzar con todo el poder que su revista tenía.

Sin embargo, sólo tres años estuvo en el anonimato, y otra vez, en una Ruleta de la Muerte, está vez en el Palacio de los Deportes, un 17 de septiembre de 1978, ya con el formato de que los perdedores siguen luchando, y con nombres como Canek, Dos Caras, Ánibal y los Villanos I y II, condenaron a la lucha sin retorno a los «difuntos» contra los experimentados Huracán Ramírez y Rayo de Jalisco, Zacarías volvía a mostrar el rostro al público.

Siguieron luchando como pareja, pero Zacarías prefirió lanzarse de nuevo de manera independiente como Bárbaro Román. Aunque ya sin una presencia estelar.

Descanse en paz. Su recuerdo como dos de los personajes más rudos de la historia de la lucha libre mexicana se quedará por todos los tiempos.

 

  • Mohawk (el Bandido original)

Mohawk y la regla de tres muertes seguidas en la lucha
Mohawk y la regla de tres muertes seguidas en la lucha

Florencio Piña comenzó a luchar en la segunda mitad de los setentas del siglo pasado con el nombre de Tony Piña en la Arena Tlacotal, allá por los rumbos de Iztacalco. Al poco tiempo se enmascaró como Silver Star luchando en todo el circuito de las llamadas arenas chicas de la capital del país. 

En 1983, al igual que otros muchos gladiadores, abrazó el proyecto de los súper libres que se gestó en el Pavillón Azteca. Comenzó una rivalidad de polendas con Flecha Veloz, con quien apostó la máscara, perdiéndola el 13 de octubre de 1985 en el mismo Pavillón. Ya sin la tapa, y con los tríos de moda entre su grupo, rasuró su pelo al estilo que le daría nombre: Mohawk, y se incorporó a los Mohicanos I y II para brindar célebres encuentros contra Los Apaches y el Trío Fantasía.

A la salida de primer Mohicano, Mohicano II y Mohawk quedaron como el dueto a vencer dentro de la carpa convirtiéndose en Campeones Mundiales de Pareja AWWA en octubre del 86, al imponerse a los Súpersónicos I y II. Por ese tiempo, de manera individual, también encarnó una rivalidad contra Súper Ratón, quién se vio obligado a defender su Campeonato Mundial Welter AWWA ante Mohawk.

El siempre recordado Rául Reyes, quien tenía un circuito de arenas muy importante, se reencontró con Piña, e idearon un nuevo personaje, Bandido. Con éste comenzó a trabajar en la Arena Apatlaco, la Atizapán y las demás del circuito de Reyes, cuando llegó el ocaso del Pavillón. También llegó a usar otro personaje más, Black and White.

Con el surgimiento de AAA, Antonio Peña confió en Piña parte del acondicionamiento de las funciones de la Caravana Estelar. Esto lo siguió haciendo durante el resto de su vida (arrendar cuadriláteros, sonido, sillas, etc., a la par de la venta en eventos deportivos). Pero también Peña vio en Piña un gran sinodal para las nuevas estrellas que comenzaba a forjar. 

La temporada de Bandido en la Caravana de Peña fue breve pero sustanciosa. A finales de 1992 comenzó a ser uno de los rivales habituales de las Gemas del Ring: Zafiro, Diamante y Brillante, además de los núbiles Rey Misterio Jr. y Juventud Guerrera, y junto a rufianes como Ángel Mortal, Tigre Cósmico, El Canalla y varios más.

Ya en el 93, y tras varias diferencias con Ángel Mortal sobre quién debía retar a Rey Misterio, Peña programó un triangular para el 28 de mayo de 1993 en Querétaro. 

Ángel Mortal se salvó tras faulear a Misterio sin que Pepe Casas ni el Tirantes se dieran cuenta, y obtuvo la cuenta de tres, condenando a Bandido y a Rey a la lucha sin retorno. Bandido dominó gran parte de ese encuentro, pero mientras preparaba un lance desde la tercera, Rey se avivó y con un súperplex dejó las cosas listas para rematarlo con la Casita. Dando a conocer el rostro de Piña una vez más.

Piña retomó su personaje de Mohawk y consiguió mantenerse bien posicionado en el circuito independiente lo que restó del siglo XX. Ya para este nuevo siglo dejó la actividad al heredar a su hijo Punker su legado. Sin embargo, era muy común verlo en los eventos junto a su hijo como a su nuera, Miss Janeth.

Descanse en paz. Su recuerdo quedará en los anales de la lucha libre nacional.

 

LA LUCHA SIGUE...
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