BLACK TERRY: «EL RETIRO ESTÁ CERCA»

Hablar de Black Terry, singular rudazo de los encordados, es hablar de una figura que ha dejado huella en este deporte. Integrante de Los Temerarios, tercia que en la época de El Toreo de Cuatro Caminos, hizo y deshizo a sus rivales, Terry es un luchador modelo e inspiración de muchos jóvenes, y que a pesar de los años, sigue activo.

Hace unos días platicamos con él, y esto fue lo que dijo para nuestros lectores:

– La lucha libre le ha dado y le ha quitado:
«Yo creo todo tiene un precio, no sólo la lucha libre. El destino o la vida indican que tienes que dar a cambio de recibir».

– En estas tres décadas que lleva como luchador, ¿ha pensado en el retiro?
«Sí, y más ahora. Creo que está cerca, demasiado cerca».

– Hace poco, Rocky Santana nos comento que también ve cercano su retiro:
«Pues mira: él y todos los luchadores de nuestra época ya estamos muy lastimados. A Rocky lo veo lastimado del hombro, de la rodilla. En mi caso, afortunadamente, no tengo lesiones fuertes; no tengo hasta el momento, gracias a Dios, pero creo que ya es hora de irnos yendo, poco a poco, para que no se sienta tan mal uno. Yo, hace algún tiempo, intenté retirarme. Eso fue hace unos ocho años en mi natal Guadalajara, pero éste es un deporte del cual, los que lo amamos, siempre tenemos el gusanito de seguir luchando. Creo que el retiro tiene que ser poco a poco».

– Usted ha mantenido una rivalidad con Rocky Santana, desde El Toreo:
«Pues Rocky era uno de mis rivales, pero en esa época de El Toreo de Cuatro Caminos, tenía que enfrentar a Misioneros, Villanos, Brazos, Cadetes. Una infinidad de elementos que había en El Toreo. Había que dar el cien por ciento para colocarse en un buen lugar».

– ¿Qué recuerda de esos días?
«Fue una época maravillosa. La juventud, para todos, es su época dorada, y para mí esa época lo fue, porque vi luchar a mis ídolos y luego me enfrenté a ellos. Estuve en los mismos programas, conviví con ellos en los vestidores, y viví muchas anécdotas a su lado. El Toreo de Cuatro Caminos fue lo mejor para mí, porque fue la época de figuras, como El Solitario, Doctor Wagner, Ray Mendoza, René Guajardo, ‘El Tanque’ Dantés, Los Misioneros, Los Villanos, etcétera. Era la época en donde había demasiado trabajo; todos los días trabajábamos. Los jóvenes de hoy dicen que trabajan cuatro o cinco veces en domingo, pero nosotros ya trabajábamos igual. Por ejemplo, los Temerarios teníamos adelantado hasta dos meses en nuestra agenda».

– ¿Cómo le hace para estar actualizado?
«En parte es motivación de mi hijo. Él una vez me dijo: ‘Oye Papá, ¿por qué no tratas un poco de meterte a lo que se está utilizando hoy en día en cuestión de castigos?’. Le contesté que no sabía si sería bueno. Él me siguió metiendo esa idea, y ya viendo algunas cosas, las implementé. No te voy a mentir diciendo que son inventos míos, porque nadie me lo va a creer, pero viendo vídeos y yendo al gimnasio, he logrado esos resultados».

– Hablando de anécdotas con sus compañeros, ¿tiene alguna que nos pueda platicar?
«A veces hay varias, pero cuando le preguntas a uno, se escapan. La que más recuerdo ahorita, fue una cuando veníamos de Puebla José Luís Feliciano y un servidor en mi carro, con Los Fantásticos (Kato Kung Lee y Kung Fu). Veníamos platicando de cuál sería la mayor ilusión de cada uno. Recuerdo que Kung Fu dijo que su máxima ilusión era que me parara en ese instante en la orilla de la carretera, porque tenía ganas de hacer del baño bajo la luz de la luna y en el campo. Seguimos avanzando, pero no me podía detener porque no había en donde, hasta que por fin vi un pequeño espacio y me detuve, para que mi amigo Kung Fu hiciera sus necesidades. Gritando, dijo: ¡Ahora sí voy a poder cumplir mi sueñoooo‚¡Ja, ja, ja!’. No se había dado cuenta que ahí había un pequeño barranco, y de repente, como que no pisó bien y empezó a rodar cuesta abajo. Todos, en vez de preocuparnos por él, nos empezamos a reír y le gritamos que su deseó se le había cumplido, bajo la luz de la luna y de un barranco».

– Me imagino que también hay anécdotas familiares:
«Sí, a veces el sufrimiento es muy duro. Por ejemplo, el sufrimiento cuando algún compañero se lastima o fallece, ya que ellos también forman parte de tu familia, pues convives a veces igual o más que con tu esposa e hijos. En cuestión personal, a veces es por problemas que tienes en la casa, son los que a veces te amarran y te ponen un poco triste, pero esos a mi no me gusta recordar; siempre me gusta recordar lo bueno, lo que te hace reír, lo que me pone alegre. Pero si debo decirte algún episodio, uno de ellos es cuando mi hijo, casi recién nacido, estaba enfermo. Lo veía pequeñito, indefenso, y no sabía qué hacer, o que decir para que estuviera bien. Otros recuerdos son cuando mi padre falleció y cuando perdí el campeonato mundial».

– Le agradecemos que nos haya regalado estos minutos
«Gracias a ustedes, porque nos dan la oportunidad de expresarnos. A toda la afición, muchísimas gracias por todo el apoyo que nos han dado, como aficionados y admiradores de este bello deporte de los costalazos. A toda esa gente que le sigue gustando la lucha clásica, la no clásica y todo tipo de lucha, les mando un saludo. ¡Ah! Y no pierdan de vista a Black Terry», finalizó.

LA LUCHA SIGUE...

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